Canonical está llevando de una manera muy confusa su campaña de crowdfunding para su Ubuntu Edge, ese supersmartphone que quiere sustituir a los ordenadores de sobremesa y portátiles para dotarles de una mayor movilidad. Destacaba tanto el pedir de buenas a primeras 32 millones de dólares como por llegar a pedir 830 dólares por un Ubuntu Edge.
Para evitar esos altos preciso habían dejado unos precios especiales para los primeros en hacerse con él, con unos precios que en la mayoría de casos superaban los 700 dólares, lo cual sigue siendo bastante caro considerando que estamos hablando de un smartphone. Pero ya no hay ofertas, ahora solamente hay un precio único en caso de querer hacerse con un Ubuntu Edge.
Canonical ha decidido hacer de tripas corazón y rebajar el precio de los terminales en su campaña para intentar reducir un poco los costes del terminal haciendo más Ubuntu Edge a un precio menos y que les seguiría dejando unos márgenes de maniobra. Así, el precio se queda en unos 695 dólares, unos precios equiparables a muchos terminales de gama alta al salir al mercado.
A los que hubiesen aportado algo antes del cambio de precio les han prometido que les reembolsarán la diferencia. Las recompensas por los primeros 50 Ubuntu Edge con invitación a una fiesta y el pack de empresa siguen adelante, además de la opción de envío internacional a quien no añadió dichos costes y unas camisetas de edición limitada para los presupuestos más modestos. Quedan menos de dos semanas y aún necesitan 22 millones de aportaciones para salir adelante.
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