Cada vez más móviles vienen sin cargador en la caja y aunque por el momento lo que sí está incluido siempre es el cable de carga/transferencia de datos, yo siempre necesito más cables para el móvil: porque tengo uno en la mesita de noche, otro conectado al ordenador, otro que va siempre en el coche y también otro en el cajón de los gadgets para por si acaso.
Como sucede con los cargadores, puedes comprar cables en casi cualquier parte, pero hay una combinación difícil de encontrar: cables con las tres 'bes', esto es, buenos, bonitos y baratos. Los cables oficiales rara vez suelen ser mi primera opción porque considero que tienen un precio elevado, pero tampoco compro lo primero que me aparece en Amazon o en el bazar de abajo. De hecho, encontré mi lugar ideal para comprar donde y cuando menos lo esperaba: comprando unos muebles para casa en IKEA.
Las mejores gangas de IKEA las he encontrado sorprendentemente en electrónica
Entre que soy una obsesa de la carga rápida (que uso para emergencias con el cable oficial que viene en la caja) y que mis teléfonos Android no son especialmente nuevos: un OnePlus 9 y un Samsung Galaxy A71, la situación es que no necesito modelos aptos para cargas a 150 W o 100 W. Pero insisto: no me conformo con cualquier cable. Mis premisas para comprar un buen cable es que tenga la longitud que desee y que tenga un diseño resistente y a prueba de uso intensivo.
Y no he dicho un cable largo o corto sencillamente porque no siempre busco lo mismo: para cargarlo mientras estoy en el sofá y tengo el enchufe lejos me viene bien uno largo, pero para el coche prefiero uno cortito. Lo que es indiscutible es la calidad, y aquí es donde flaquean muchísimas alternativas de marcas poco conocidas que puedo encontrar por internet.
En Amazon antes tiraba de aquellos productos vendidos y enviados por ellos mismos y la verdad, más allá de que ante cualquier problema durante la garantía tienes un recambio o la devolución del dinero, no creo que tengan los mejores cables en calidad precio. Pero es que en general si te pones a buscar cables, descubrirás que no son baratos precisamente incluso aunque no sean originales. Aquí es cuando vuelvo a IKEA, una firma también con peso y reputada que tiene su correspondiente garantía y unos precios magníficos para los cables.
Pero vamos a lo concreto: de momento tengo dos cables de IKEA y no descarto que más pronto que tarde llegue también el cargador rápido que acaban de lanzar. El primero es un sencillísimo modelo de tipo USB-C a USB-A de un metro de longitud que llevo siempre en el coche (es la toma que tiene mi Polo) bastante sencillo y resultón, lo elegí en amarillo para encontrarlo rápidamente. Me costó menos de dos euros y en teoría aguanta hasta 25.000 veces. De momento aguanta como el primer día.
Pero la auténtica joya de mi corona de cables es el LILLHULT, un cable de 1,5 metros de longitud con una cinta para enrollarlo y guardarlo fácil y un diseño de lo más premium con cabezal de goma y cordón textil a prueba de enrollamientos. Tiene dos tomas USB-C y me pareció magnífico por menos de seis euros por su calidad, longitud y detalles. Nota: admite transmisión de datos hasta 480 Mb/s y 3 Amperios de intensidad.
SITTBRUNN USB-A a USB-C, amarillo claro,
LILLHULT USB-C a USB-C, gris oscuro, 1.5 m
Portada | Eva Rodríguez de Luis
En Xataka Android | ¿Qué pasa si cargas el móvil con un cargador más potente?