Aunque Waze es la aplicación más popular (y probablemente, la mejor) para conocer la presencia de radares fijos y móviles en la carretera, existen muchas otras alternativas gratuitas que cumplen esa función. Sin embargo, hay cada vez más conductores que, en vez de utilizar apps de navegación, están empezando a usar apps de mensajería para alertar al resto.
Es lo que se denomina "método gallego" porque hace un par de meses conocimos que un gallego iría a juicio en Galicia por avisar de controles a otros 15.000 conductores a través de WhatsApp. La DGT ya está buscando cómo combatirlo.
Una conducta que atenta contra la Seguridad Ciudadana
Existen infinidad de trucos para incumplir las normas en la carretera. Y uno de los más extendidos es avisar a otros conductores de la presencia de radares y controles de la DGT. Tanto los inhibidores y los detectores de radares como las ráfagas de luces se sancionan duramente, así que el móvil se ha convertido en la herramienta perfecta para ello.
Hasta ahora, lo más habitual era utilizar alguna app de navegación para reportar incidencias en la carretera (incluyendo radares), pero las apps de mensajería como Telegram y WhasApp están ganando terreno a la hora de recibir las alertas de miles de conductores al instante.
Ni el reglamento de Tráfico ni su Ley ni su Reglamento de Circulación especifican la prohibición de alertar de un control mediante un aviso en una aplicación de mensajería o navegador. Además, las apps no son capaces de detectar por sí mismas la presencia o no de un radar, simplemente envían notificaciones "avisan" al conductor con lo aportado por otros usuarios.
A pesar de ese vacío legal, el pasado mes de mayo, los Agentes de Tráfico denunciaron a un particular que gestionaba grupos de Whatsapp de hasta 15.000 usuarios en los que se avisaba de los controles. Lo hicieron escudándose en el artículo 36.23 de la Ley de Seguridad Ciudadana, que califica como infracción grave:
"El uso no autorizado de imágenes o datos personales o profesionales de autoridades o miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que pueda poner en peligro la seguridad personal o familiar de los agentes, de las instalaciones protegidas o en riesgo el éxito de una operación, con respeto al derecho fundamental a la información".
El usuario en cuestión era gallego, de ahí que a esta forma de proceder se le haya denominado "el método gallego". En declaraciones a El Faro de Vigo, Pere Navarro, director de la DGT, afirmó que:
"El aviso por redes de los controles policiales socava gravemente la seguridad vial, ya que permite a los infractores evadir la ley, poniendo en riesgo la vida de todos los usuarios de las vías. Es un acto insolidario que va contra la línea de flotación de la seguridad vial".
Ese mismo medio asegura, además, que el Gobierno ya trabaja junto a la DGT en la redacción de nuevas normativas o la modificación de las existentes para castigar con dureza el aviso de los controles policiales. La intención es definir esta acción como "infracción muy grave" para que conlleve una multa de 500 euros.
Imagen de portada | SplitShire
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