¿Cuál es la mejor aplicación de retoque fotográfico?

Con el cada vez mayor protagonismo de las cámaras en los smartphones Android era lógico que el resto de elementos a los que tocaba se actualizaran también para estar a la altura. El mejor ejemplo de ello son las aplicaciones de retoque fotográfico, hace años surgieron unas cuantas propuestas que se han ido puliendo para hacer de la edición un proceso fácil de hacer en una pantalla táctil. Al final, aplicación a aplicación, han creado un nicho muy concreto con propuestas de todo tipo. Muchas comparten elementos e ideas pero todas buscan también ser únicas y, por extensión, la que acabe instalada en tu Android.

Ya no hay excusas para llevarse las fotos al ordenador y procesarlas allí, desde un teléfono, con la aplicación adecuada, podemos hacer un montón de ediciones y conseguir resultados muy bueno. Ahora, si comenzamos a buscar veremos que hay un montón de opciones en Google Play. ¿Cuál es la mejor? Tras un buen tiempo revisando las principales opciones que hay, he llegado a una serie de conclusiones para, al final, quedarme con una sola aplicación.

Simplificar el uso, que no la experiencia

Cuando hablamos de hacer aplicaciones para el móvil se suele caer en el error de que deben ser más sencillas para que se puedan utilizar. Sí pero no. Es obvio que lo que usamos en una pantalla táctil dista mucho de lo que hacemos con un ordenador con teclado y ratón. Sin embargo, esa adaptación no tiene que traducirse en hacerla tan elemental que al final se pierda el valor. Tampoco hay que caer en el otro extremo: pasarnos de ambiciosos y querer traer todas las funciones tal cual. Al final todo pasa por encontrar el equilibrio entre un buen número de opciones, que sean eficaces y, además, no nos hagan sentir abrumado cuando estamos editando una fotografía. No es fácil.

Entre esos dos pilares, cada aplicación ha decidido tomar su camino acercándose a uno de los dos. Tenemos un poco de todo, estudios que han nacido hace poco y quieren hacerse un hueco frente a compañías que han tenido que adaptarse y lanzar versiones de sus servicios pensando en teléfonos móviles y tabletas. Comencemos por las primeras, en concreto por una de las pioneras y que con el tiempo ha sabido evolucionar para seguir siendo fuerte: Camera 360.

Antes de que tuviéramos Snapseed y compañía, hubo una aplicación de retoque que gustó mucho. Su nombre era Camera 360 y ofrecía un montón de efectos y filtros para retocar fotos. A día de hoy se ha convertido en una de las opciones más completas: tiene un buen número de herramientas para tocar nuestras imágenes y darle un toque más creativo. También ha ganado algunas funciones que originalmente no tenía, como la edición más clásica. Ya sabéis: exposición, saturación, balance de blancos...

Tiene algunas opciones diferenciales muy interesantes como una integración en la nube bastante acertada. Sin embargo, es muy abrumadora y al final hay tantísimas opciones que es fácil perderse. Mucha paja para unas opciones de edición que además tienen a dotar de un toque demasiado artístico y fantasioso a las imágenes: tonos muy saturados cuando metemos un filtro, efectos dramáticos en fotos que no requieren ese tono... Es útil si nos gusta y buscamos estos resultados pero desde hace tiempo que ha dejado de ser una opción interesante.

Luego tenemos el caso de Pixlr, AutoDesk lleva ya unos cuantos años en esto de la edición y, a mi gusto, tienen el mejor editor web de fotos. Sin embargo, en móviles tienen una aplicación que si bien es completa, es algo desordenada. Las opciones, muchas, quedan amontonadas en muy poco espacio. Para hacer correcciones rápidas está bien pero a nivel de efectos y filtros está muy por detrás de otras aplicaciones.

Adobe también lo intenta con una aplicación que podría tener muchísimo potencial pero se queda corta. Lo primero de todo es su insistencia por conectar con su servicios de cuentas y, por otro, ofrecer muchas opciones a través de micropagos. No estoy en contra de que quieran monetizar su creación pero cuando tu competencia lo está ofreciendo gratis (o cobrando por elementos más secundarios como los filtros) poco puedes hacer. Aún así, si pasamos por caja, es una opción muy interesante, aunque no la mejor de su categoría.

De entre las más recientes hay dos casos que me gustaría destacar. Por un lado Retrica, una aplicación que está funcionando muy bien entre la gente joven. Motivos tiene para triunfar, es sencilla, funciona bien y tiene bastantes filtros. Además, permite hacer collages de forma muy rápido y el acabado final es bueno. Sin embargo, es una aplicación algo corta si queremos más opciones de edición.

Otro caso interesante es el de Over. Lejos de la edición canónica, ellos nos invitan a que decoremos con textos e imágenes nuestras fotos. Hay otras aplicaciones en esta lista que también hacen estas dos funciones pero ninguna la hace tan bien como ella. Buena selección de iconos y tipografías así como una tienda para comprar más packs. El precio es razonable.

De todas las aplicaciones que hay, me quedo con VSCO Cam, con medalla de plata para Snapseed. Os lo explico.

¿Por qué me quedo con VSCO Cam?

Como decíamos al principio, es importante que un editor de fotos sea completo pero a la vez fácil de usar y permita conseguir buenos resultados. Suena como una utopía pero VSCO Cam es quien mejor consigue ese equilibrio de fuerzas. Puede que haya aplicaciones más potentes (Snapseed), con más filtros y detalles (Camera 360) e incluso ridiculamente fáciles de usar (Retrica) pero la aplicación de sobresaliente es ésta.

Fácil de usar, con conectividad en la nube, filtros atractivos y que dan mucho juego, un modo de edición muy rápido con el que se pueden hacer ediciones de mucha calidad. Además se actualiza con regularidad y siempre trae filtros y opciones nuevas. Su almacenamiento en la nube es genial e ideal si utilizamos varios dispositivos.

En su día le di una oportunidad para probarla pero en poco tiempo hice que desinstalara el resto y me quedara solo con ella. Tiene mucho potencial para conseguir buenos resultados y si algún día se actualiza para dar soporte a RAW DNG entonces se convertirá en la aplicación definitiva.

Mi segunda opción siempre será Snapseed

Aunque VSCO ocupa un lugar privilegiado en mi Android, con el tiempo volví a aprender a amar Snapseed y darme cuenta de que con ella podía conseguir retoques que con el resto no puedo: ediciones por puntos, efecto HDR muy bien ejecutado, más opciones de desenfoque y marcos... Al final mis herramientas de edición son esta pareja.

Es cierto que paso más tiempo con VSCO porque la mayoría de retoques que hago son mecánicos: reducir un punto la exposición, suavizar el contraste, afilar bordes... De hecho con una de las últimas actualizaciones se podía automatizar todo esto mucho más.

Sin embargo, cuando quiero trabajar con más paciencia y mimo primero hago todos los retoques con Snapseed y luego me llevo la imagen a VSCO para darle los últimos detalles. Si además le pega algún toque gracioso, Over siempre está en la recámara para añadir imágenes o texto.