La moda en estos últimos tiempos en el mundo de la telefonía móvil es realizar terminales que soporten todas las torturas que se nos ocurran, o por lo menos minimizar los daños ante estas. Quizás esto tiene origen en las pantallas Gorilla Glass, que poco a poco se han ido desarrollando con la idea de mantener nuestra pantalla sin un solo arañazo. Después, aparecieron los certificados que nos aseguraban que algunos dispositivos soportaban salpicaduras, polvo e incluso inmersiones.
El protagonista hoy es el último buque insignia de Samsung, cuyo certificado IP67 nos asegura en sus especificaciones que es capaz de permanecer 30 minutos bajo el agua en una profundidad máxima de un metro. Un afortunado poseedor de este terminal ha decidido probar las capacidades submarinas de este, optando por introducirle durante una hora en una lavadora en funcionamiento.
Para el asombro general el dispositivo aguanta tanto a los golpes como al agua, como podéis comprobar a partir del minuto 5:25. Hay que tener en cuenta que la garantía de Samsung no cubre más allá de lo que viene escrito en las características del teléfono, por lo que aconsejamos no probar esto en casa.
De regalo para los amantes de estos test, os dejo otro corto vídeo donde se enfrenta a un todopoderoso martillo donde no tiene tanto éxito como en la experiencia de la lavadora. Aún así, se observa que la resistencia a los golpes es bastante buena, algo que también esperamos de un terminal de gama alta.
Vía | AndroidWorld.it
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