Parece que la lucha en el mundo del hardware para plataformas móviles se recrudece por momentos, y es que a la reciente llegada de Intel al sistema operativo del androide verde, ahora se le une el desembarco de ST-Ericsson, que ya ha colocado sus chipsets NovaThor de doble núcleo en dispositivos de fabricantes punteros.
Si primero fue Sony Mobile la que confió en los procesadores de ST-Ericsson para su gama media, ahora parece que es el gigante Samsung el que se ha interesado en NovaThor para algunos de sus nuevos dispositivos.
En concreto, hablamos del Samsung Galaxy Ace 2, en su modelo i8160, que destinado a batallar en la gama media parece que montará un NovaThor igual al que ya utiliza el Sony Xperia P. Por otro lado, el nuevo teléfono a un proyector pegado, el Samsung Galaxy Beam, parece que también utilizará este tipo de procesador.
Como hemos dicho ya, ambos utilizarán el NovaThor U8500 con procesador de doble núcleo, un hardware con gran relación precio/potencia, aunque mientras el Galaxy Ace 2 lo hará funcionar a 800 MHz, en el Galaxy Beam lo veremos a una velocidad de reloj de 1 GHz.
ST-Ericsson ha conseguido finalmente, y a pesar de la encarnizada lucha entre Nvidia, Qualcomm, Intel o la propia Samsung, meterse en un hueco de mercado poco explorado por los mencionados grandes, que se centran en lanzar procesadores de gama alta con un coste relativamente elevado.
La compañía cuenta además en la nota de prensa que el Galaxy S Advance i9070 también lleva hardware firmado por ellos, lo que nos lleva a pensar que Samsung, a pesar de ser un reputado fabricante de componentes, no tiene una alternativa de doble núcleo y precio asequible que usar para la gama media.
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