Si queremos tener plena privacidad en nuestro uso del móvil y tener siempre a salvo nuestros datos, casi todo pasa por la contraseña. Si bien hay varios consejos para elegir una buena contraseña en el que se incluye el uso de caracteres alfanuméricos o no usar nunca la misma contraseña, usar un gestor es la mejor solución para tener todo en uno.
Si bien cada caso es particular y no siempre se tienen las mismas necesidades, tanto por mi experiencia propia como por observación de mi entorno, he descubierto que merece mucho la pena pagar por un gestor de contraseñas. Y a continuación te expongo los motivos.
Hay opciones gratis muy buenas, aunque no para todos
Como de todo (o casi todo), encontramos opciones gratuitas para tener un gestor de contraseñas sin pagar un solo euro. Un ejemplo de ello es el gestor de contraseñas de Google. Una herramienta que, además, ha recibido considerables mejoras recientemente.
Este permite gestionar las contraseñas de una forma sencilla desde el móvil, pudiendo ir almacenando todas de forma manual o automática cuando iniciamos sesión en una web o app por primera vez. Además, ofrece también avisos de seguridad si Google detecta que la contraseña puede haber sido filtrada, si se está reutilizando mucho una clave o si esta es poco segura.
Sin embargo, este gestor de Google podría no ser suficiente si desea una herramienta más potente y que, sobre todo, sea multiplataforma. Ojo, este funciona también en iOS e incluso en Windows y macOS, pero no de forma tan completa como en Android. De igual forma que si se usa un navegador que no sea Chrome pierde efectividad.
Luego nos encontramos con otros gestores gratuitos que, sin querer generalizar y meter en el mismo saco a todos, sí debemos decir que la mayoría suelen ser delicados en la gestión de nuestros datos. Ya se sabe aquello de que cuando algo es gratis, es que el producto somos nosotros. Dejar información tan sensible como las contraseñas en manos de apps poco fiables puede acabar siendo algo de lo que nos arrepintamos.
Qué debe ofrecer un buen gestor de contraseñas
Existen varios requisitos que todo gestor de contraseñas para el móvil debería cumplir. Sin embargo, hay ocho aspectos que podemos considerar como fundamentales y que, al menos a juicio de este servidor, debería tener sí o sí uno que sea de pago.
Generar contraseñas seguras
Ejemplo de una contraseña segura
El primero de ellos es que permita generar contraseñas seguras. Es decir, un generador que permita crear claves con patrones de seguridad altos. Es decir, de varios dígitos mezclando caracteres alfanuméricos en mayúscula y minúscula e incluso elementos como interrogaciones o guiones.
Sistema de seguridad
Que tenga un buen sistema de seguridad detrás que nos dé plenas garantías de que nuestras contraseñas están a salvo. Un buen gestor de contraseñas no debería dar acceso a nuestra información ni siquiera a los desarrolladores de la app. A esto se le suma la imperiosa necesidad de que el gestor como tal pueda tener una contraseña maestra con la que acceder y a la cual solo nosotros tengamos acceso.
Rastreo de contraseñas filtradas
Hilando con lo anterior, también podría considerarse como una característica básica que el gestor sea capaz de rastrear problemas de seguridad relacionados con la contraseña. Y más allá de analizar si tu contraseña cumple con los patrones básicos de seguridad y si se repite en varias cuentas, es un plus importante que incluya un rastreador que permita ver si tu cuenta ha aparecido en alguna filtración de datos para que puedas cambiar la contraseña de inmediato.
Autenticación de doble factor (2FA)
Tener opciones de autenticación de doble factor es otro requisito que, si bien todavía no es un estándar en todos los gestores, cada vez se va incorporando más. Poder crear un sistema 2FA es igual e incluso más importante que una contraseña, ya que se añade una barrera de seguridad más para evitar que se apoderen de nuestras cuentas.
Que sea multiplataforma
No podemos obviar como básico el hecho de que sea multiplataforma. Y no nos referimos solo a que esté disponible en sistemas operativos móviles como iOS y Android, algo útil si cambiamos de móvil, sino también en ordenadores con Windows y macOS. Al final tenemos presentes las contraseñas en todo nuestro entorno digital y tener un gestor que quede relegado a una sola plataforma es cuanto menos tedioso.
Añadir otros datos que no sean solo contraseñas
Otro apartado que, quizás sea más a gusto del consumidor y que en mi caso es primordial, es que también se puedan añadir otro tipo de datos. Por ejemplo el número, caducidad, código de seguridad y PIN de tarjetas de crédito/débito e incluso las cuentas bancarias. Hay gestores que incluso permiten crear notas de texto seguras, por lo que las posibilidades pueden ser infinitas.
Precio justo
Por último, y no menos importante, que tenga un precio justo. Como bien decimos desde el titular de este post, consideramos que pagar por un gestor de contraseñas es invertir bien el dinero, aunque todo tiene un límite. El precio "justo" realmente no existe o no al menos de forma unánime, por lo que siempre es aconsejable revisar hasta qué punto nos va a ser de ayuda un gestor de contraseñas y cuánto estamos dispuestos a pagar, ya que tampoco es cuestión de pagar por pagar.
Retomando mi caso personal, y sin desprestigiar gestores como el de Google o el de iCloud (Apple) que también he probado, debo decir que desde hace años me sale muy a cuenta tener uno de estos gestores. Insisto en recalcar que, si para ti es suficiente con una opción gratuita, genial. Pero si no es así, no te preocupes en pagar porque seguro que acabarás sacándole partido y ganando en tranquilidad.
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