Los dos alojamientos en los que me hospedé en mi viaje de hace unas semanas me pidieron que les compartiera el DNI o pasaporte como el proceso de check-in, algo que se está haciendo cada vez más habitual a pesar de no formar parte del nuevo registro de hoteles. Y pasar una foto del DNI tal cual es una pésima idea. No lo digo yo, lo dice el Instituto Nacional de Ciberseguridad.
¿Qué hacer en este caso? Pasar el DNI, sí, pero con unas modificaciones que censuren sutilmente partes del documento de identidad que son innecesarias para un alojamiento, donde normalmente quieren simplemente ver nuestro nombre y la foto adjunta y no el resto de identificadores.
Te mando el DNI, pero modificado
En mi último viaje me hospedé en dos alojamientos distintos: uno reservado en Airbnb y otro en Booking.com. El primero me pidió que le enviara fotos de los DNI y pasaporte de los huéspedes en el propio chat de Airbnb; el segundo hizo lo mismo a través de los mensajes de Booking.com (y por WhatsApp).
Es normal que los alojamientos necesiten rellenar un registro de viajeros con los datos de quién va a hospedarse en la casa y también que requieran de algún tipo de certeza de que los datos que les hemos proporcionados son reales, usando algún documento oficial. Aún así, enviar un documento de identidad como un DNI sin ningún tipo de modificación pone nuestra seguridad en peligro.
Un registro de viajeros incluye normalmente nombre y apellidos, fecha de nacimiento, datos de contacto, dirección y el número del documento de identidad, pero los alojamientos no necesitan conocer datos personales del documento de identidad como la validez, el número de soporte o la emisión. De hecho, es mejor que no los conozcan, pues podrían usarse para suplantar nuestra identidad en servicios donde se usan estos datos para identificarnos.
¿La solución? Enviar el documento, pero censurado. Esta es una de las recomendaciones del Incibe que comparten algunos cuerpos de policía, como es el caso de la Policía Local de Elche, en X. Básicamente implica editar mínimamente la foto que le hemos hecho al DNI para difuminar, pixelar o tapar datos personales innecesarios.
En mi caso concreto, edité la foto del DNI para pixelar el número de soporte, la fecha de emisión y validez y el identificador de la esquina inferior derecha, algo que pude hacer directamente con el editor de WhatsApp para un apartamento y con el editor de fotos integrado del móvil para el otro (pues el chat de Airbnb no deja editar antes de enviar).
Si quieres ir un paso más allá, hay quien opta por incluir un texto en mitad del documento, como marca de agua, donde se indique que el documento se comparte con una finalidad concreta, lo cual va a dificultar que alguien lo use para otra finalidad.
En ningún caso me pusieron ninguna pega de que enviara el documento con algunos datos tapados y, al ser una revisión manual y no automática, no hubo mayor problema.
Si hubiera habido alguna pega, siempre habrían quedado alternativas como optar por mostrar el documento real en persona (aunque esto implique un viaje extra a la oficina de la agencia) o incluso mostrarlo en una videollamada. El único problema que nos podemos encontrar es que sea un sistema de verificación automático que requiera, por tanto, que subamos una foto del documento sin alterar. En tal caso, deberemos informarnos de qué pasa con nuestra foto después de que la hayamos enviado.
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