HTC anunciaba novedades para este mismo mes de marzo, y cumpliendo plazos los taiwaneses acaban de presentar en los Estados Unidos el nuevo servicio HTC Uh-Oh Protection, una ampliación de garantía por la cual el fabricante asume el cambio del dispositivo -sólo disponible para los HTC One M9 y One M8- si hubiese daños por golpes, caídas o agua durante el primer año.
Sin embargo, la presentación del programa HTC Uh-Oh ha dado para mucho más, pues no han dejado indiferentes a nadie las palabras de Jason Mackenzie, el vicepresidente de HTC para América, que al parecer tenía muchas ganas de hacer rodar cabezas.
De todos modos, Mackenzie ha sido muy cauto para no poner nombres, aunque leyendo entre líneas se puede deducir que sus afirmaciones van directas a la línea de flotación de Samsung y su cambio de rumbo con el Galaxy S6.
En la presentación, desde HTC América, se han asegurado de dejar claro que su camino es muy diferente al de "un directo competidor", afirmando además que HTC no se plantea renunciar a la expansión de memoria.
Por si esto fuera poco, también han querido hacer hincapié en el hecho de los taiwaneses son los únicos que han mantenido en aumento la capacidad de la batería de su terminal estrella, clara alusión a la reducción de batería que Samsung ha llevado a cabo para primar el diseño del Galaxy S6.
Dice Jason Mackenzie que la autonomía es la principal virtud de su HTC One M9, y que los usuarios podrán disfrutar de contenidos multimedia durante más tiempo, aunque este tipo de uso requiera un consumo mayor en los smartphones.
HTC y las eternas promesas
No cabe duda de la capacidad de HTC para fabricar buenos dispositivos. Un servidor todavía se acuerda con nostalgia del Nexus One, para mi el mejor smartphone de la nueva era en cuanto a innovación, diseño y acabados.
Sin embargo, no se puede vivir siempre de rentas del pasado, y aunque los taiwaneses hayan sido pioneros en el mercado smartphone en general y en la plataforma Android en particular, lo cierto es que hace tiempo que parece que han perdido el rumbo de forma estrepitosa.
Curioso cuando menos es que ahora utilicen para atacar alguno de sus principales hándicaps en el pasado, como la ranura para tarjetas microSD de la que carecía por ejemplo el HTC One M7, y que luego la compañía recuperó para la causa dadas las críticas.
Precisamente Samsung ha sido quien les ha enseñado la valiosa lección de que, a veces, es necesario dar un paso atrás para luego continuar dos adelante, pues el gigante surcoreano se ha atrevido a romper con sus señas de identidad para lanzar el smartphone que el mercado requería. El éxito o fracaso lo traerá el tiempo, y seguramente con él vendrán las soluciones y mejoras.
HTC se ha perdido en los últimos años en promesas vanas e incumplidas, con la eterna responsabilidad de volver a ser quien eran, sabiendo perfectamente donde estaban sus puntos débiles pero incapaces de corregirse a si mismos.
Nosotros le damos la razón a Peter Chou, el problema de HTC no es de calidad de sus productos, pero los taiwaneses van a tener que atreverse a dar un giro definitivo a su estrategia, y adaptarse por fin a un mercado que ha cambiado mucho pero que, con nostalgia, todavía les espera.
En Xataka Android | HTC, tenías una sola tarea con el One M9: hacer un móvil mejor que el M8 Vía | PhoneArena
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