Samsung está a un paso de lograr un hito: evitar que su máximo rival fabricando pantallas pueda vender móviles en Estados Unidos

Solemos identificar a Samsung por sus productos como teléfonos, tablets o televisiones, pero la compañía coreana va mucho más allá. Una gran parte de su negocio está en la fabricación de componentes de todo tipo, tanto para sus dispositivos como para empresas de terceros. Ahí entra Samsung Display, destinada, como su nombre indica, a la fabricación de pantallas.

Esta rama de la firma coreana es una de las principales fabricantes del mundo de pantallas OLED, aunque rivales no le faltan. Uno de sus principales competidores es la compañía china BOE, y entre ambas hay una lucha por alzarse con la corona en este tipo de componentes. Sin embargo, tal y como apunta el medio coreano TheElec, Samsung se acaba de anotar un punto que la puede colocar en una posición tremendamente ventajosa.

Una infracción de patentes que coloca a Samsung en una posición genial

Como hemos explicado un poco más arriba, la lucha entre ambos fabricantes asiáticos es ciertamente encarnizada. BOE está poniendo toda la carne en el asador para convertirse en un referente en la fabricación de pantallas OLED, muy utilizadas por todo tipo de dispositivos. Toda esta situación se dinamitó en el momento en el que Samsung interpuso una demanda frente a la compañía china por la infracción de varias patentes.

El tema ha estado en el aire durante varios meses, aunque todo cambió el pasado 15 de noviembre. Ese día, la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (o ITC) emitió una conclusión preliminar sobre esta infracción de patentes, considerando en ella que, efectivamente, BOE ha utilizado ilegalmente la patente de Samsung para la fabricación de pantallas OLED.

Concretamente, este organismo americano ha determinado que el gigante chino ha infringido hasta tres patentes de Samsung Display, mientras que los importadores y mayoristas americanos denunciados también en el proceso habrían infringido hasta cuatro patentes.

Esta decisión, que como hemos explicado más arriba, es de momento preliminar, deja en una posición muy ventajosa a Samsung. La firma surcoreana pretende que no se puedan vender móviles en Estados Unidos con pantallas de la empresa BOE, lo que la convertiría en la reina de las pantallas OLED en uno de los principales mercados del mundo.

Ahora bien, en este punto Samsung no puede terminar de cantar victoria. ITC determina que el daño sufrido por la infracción de patentes no es suficiente para justificar esta prohibición. La firma surcoreana ha pedido a esta entidad que vuelva a examinar esta petición de cara al fallo definitivo, pero para conocer la resolución del mismo no nos queda más remedio que esperar, como mínimo, hasta el próximo mes de marzo.

Vía | TheElec

Imagen de portada | Samsung

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