Después de dos años de ausencia y tras un fracaso estrepitoso, LG retorna por fin al mercado de las tabletas Android, y lo hace precisamente en el tamaño más complicado y más competido, el de las tabletas pequeñas.
Su nueva LG G Pad 8.3 llega para llevar la nueva y exitosa filosofía de LG a una tableta de 8.3 pulgadas que, con los mínimos marcos posibles, se asemeja en tamaño a dispositivos con pantallas menores.
Precisamente es este el principal caballo de batalla de la nueva tableta de LG, pues en su diseño se ha puesto el mayor foco, con líneas refinadas y un peso de 338 gramos que la coloca entre las más ligeras del mercado.
En cuanto a especificaciones, os recordamos que cuenta con una pantalla de 8.3 pulgadas y resolución de 1.920 x 1.200 píxeles, que estará animada por un chipset Qualcomm Snapdragon 600 con procesador de cuatro núcleos a 1.7 GHz.
La memoria es de 2 GB de RAM y el almacenamiento interno llega a los 16 GB, pero es ampliable con tarjetas microSD. La conectividad se restringe al WiFi, pues no existe ningún modelo con módulo 3G o LTE, aunque la tableta cuenta con Bluetooth, GPS, acelerómetro y sensor de proximidad.
No hay tampoco rastro del chip NFC, pero sí se ha integrado un puerto infrarrojo, muy de moda últimamente, para permitir el uso como mando a distancia universal. A todo ello dará vida Android 4.2.2 Jelly Bean, gracias a una batería de 4.600 mAh de capacidad.
La G LG Pad 8.3 ya está disponible en nuestro país a un precio de 329 euros, lo que la convierte en una de las opciones más atractivas entre las tabletas de gama alta de pequeño formato.
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