La semana pasada Google anunció a través de su blog de desarrolladores que a partir de ahora los programadores podían subir hasta 4GB a Google Play, antes conocido como Android Market. Hasta aquí todo bien, los usuarios se beneficiaban de ello y los creadores no tenían que depender de sus propios servidores para gestionar tanto tráfico.
Sin embargo esta mejora, que a priori se antoja como positiva para todos, tiene sus matices. No todo es tan bueno como parece y es que este cambio no ha sentado bien a todo el mundo ya que para algunos desarrolladores más que una ventaja termina siendo un problema.
Vamos a explicar el cambio que se ha producido en Google Play. Por un lado los creadores de apps sólo podrán seguir subiendo apks de 50MB. Algo lógico si tenemos en cuenta que una descarga muy pesada desde un dispositivo móvil puede ser bastante frustrante. A lo que además hay que añadir el caso de la gente que descargue sólo por 3G.
Bajados esos 50MB el resto de contenidos se tienen que descargar una vez se ha instalado la aplicación. En este caso nos encontramos con la diferencia de que es Google quien aloja los archivos y no sus creadores. A priori es todo ventajas: servidores más potentes que son capaces de lidiar con mucho tráfico, menos costes para los programadores… Sin embargo hay un pequeño problema.
Cuando se están bajando los datos desde el servidor de Google éstos almacenan la caché en la memoria interna. Es decir, que los Android con poco espacio libre tendrán problemas para bajar según qué aplicaciones o juegos. Anteriormente se podía elegir si se podía volcar o no el tarjeta SD pero con el método actual no es posible, de momento.
Este cambio, entre otros motivos, está dando quebraderos de cabeza a desarrolladores como Mika Mobile quien ha declarado que cambiar la estructura de sus juegos para adaptarlos a este cambio es un problema. De hecho, y de nuevo insisto que hay más motivos de fondo, ha hecho que la compañía abandone Android para centraste en otros sistemas operativos.
De momento las cosas están así. La caché de las aplicaciones pesadas recae sobre la memoria interna. A día de hoy casi todos los smartphones y tablets modernos no tienen problema con ese aspecto pero con los que tienen ya un tiempo sí. De hecho cada vez oigo más quejas de cómo modelos como el Nexus One se quedan cortos en este sentido. Veremos si Google recula y que se plantea el poder usar las tarjetas microSD para volcar la caché y los datos descargados.
Vía | MikaMobile
En Xataka Android | El Android Market ya permite apps de hasta 4GB