Samsung, cómo es su personalización software de Android

Samsung tiene buena parte de la culpa de la percepción que se tenga ahora de Android. Para bien o para mal, simplemente por cuestiones de volumen de distribución. Históricamente acumula una buena parte de la tarta de este sistema operativo.

No solo hardware, la decisión de compra de un teléfono incluye calidad de su software, la utilidad que tenga y las aplicaciones que añada. Vamos a ver qué trae esta personalización en la capa de software que incluye Samsung.

TouchWiz se ha ganado la fama de estar presente en tantas generaciones de dispositivos Galaxy, evolucionando con el sistema operativo y acompañando con funciones cada vez más completas en algunos casos, confusas en otros.

No es solo un launcher

La capa de personalización es más que un launcher que se puede instalar en nuestros dispositivos. Es algo bastante más profundo que afecta a toda la interfaz del sistema operativo, y a las funciones que pueda aportar ésta.

Lo cierto es que hasta ahora TouchWiz y en general el software de Samsung ha cosechado unas críticas bastante malas. No es para menos, si bien muchos ajustes son útiles y se ha ido adelantando a su tiempo, puede resultar caótico si quien utiliza el teléfono no está a la última.

El lanzador de aplicaciones, o launcher, llega con funciones muy básicas pero certeras. Podemos crear varios escritorios, y elegir cual queremos que sea el principal. Esto que parece tan fundamental no llegaba en el launcher de los Nexus hasta el Google Experience hace menos de un año.

En los Galaxy vemos un panel de notificaciones muy completo y úti, con los interruptores básicas a golpe de tap y con capacidad de configuración. Esta opción llego mucho antes que los ajustes rápidos de llegaron en la primera gran revisión de Jelly Bean, Android 4.2.

Tenemos también una multitarea mejorada (a la que se accede pulsando el botón central unos instantes en teléfonos pre-Galaxy S5), que añade un acceso directo a Google Now, el administrador de aplicaciones de Samsung y un botón para cerrar todas las aplicaciones cargadas en memoria.

Ahora también incorpora el My Magazine en sus teléfonos de gama alta, un feed de noticias que podemos personalizar ligeramente, con el motor de Flipboard, a cambio de incorporar de serie esta aplicación en sus teléfonos y tablets.

Desde el Note 2 también cuenta con el modo de utilización de aplicaciones a pantalla partida, que nos permite usar dos aplicaciones al mismo tiempo. Eso sí, tienen que estar adaptadas (las más habituales como navegadores, clientes de mensajería y aplicaciones de sistema lo están). Por no hablar de todas las utilidades que viene acompañando al S Pen en esta línea.

Los errores que comete

El problema llega cuando nos topamos con duplicidad y acumulación de funciones y aplicaciones. Por ejemplo, Samsung integra su propio S Voice, con comandos de voz. Este asistente llegaba con el Galaxy S3 y poco ha mejorado desde entonces. ¿Por qué duplicar buena la experiencia que se tiene con Google Now? O lo haces mejor o no lo hagas.

Parte de 'la culpa' la tiene el hecho de que Google obliga de alguna forma a los fabricantes a incluir todas sus aplicaciones si quieren contar con su tienda de software. Así, acabamos teniendo dos clientes de correo con GMail, dos de galería con Google Fotos, dos calendarios o dos tiendas de software teniendo en cuenta las Galaxy Apps.

También ha sido muy habitual en esta capa de personalización encontrarnos con múltiples fallos recurrentes. ¿Quién no recuerda el lag al abrir el cajón de Widgets, o en la galería? Estas pequeñas cosas pasan factura, de una interfaz que a nivel general funciona bien.

Otro tema es el apartado visual, donde personalmente creo que Samsung tiene un problema, año tras año actualizan la capa existente con correcciones, sin llegar a dar coherencia a toda la interfaz y unificar la experiencia entre dispositivos. Hay demasiadas funciones, botones, widgets, que pueden saturar al nuevo y al que no lo es tanto. No digo que se eliminen, simplemente que se integren con algo más de elegancia.

Creo que aquí el alto consumo de las pantallas Amoled en el blanco ha penalizado con interfaces excesivamente oscuras y negras. También, aunque eso se puede desactivar, con un modo de pantalla por defecto demasiado saturado, si bien se corrige automáticamente cuando vemos según que contenido.

Otro error recurrente es la aplicación de cámara de Samsung. No es para nada intuitiva ni agradable, y muchos de los ajustes más básicos están rebuscados. Aquí un ejemplo a seguir es, sin duda, la cámara en los Lumia de Nokia.

Por último, también tenemos ese pequeño caos que es entrar en los ajustes del buque insignia de turno, con tantas opciones disponibles (ojo, no digo que no sean útiles muchas de ellas) que hacen perderse a cualquiera.

El TouchWiz que sigue

Google da un paso con Android L y Material Design, avanzando unas líneas de diseño a seguir por los fabricantes, algunos de los cuales ya están avanzando elementos. Por ejemplo, el Galaxy Note 4 ya tiene desde la pantalla de multitasking el nuevo diseño de montón de tarjetas vertical que probamos en la IFA. También vemos algún tono más luminoso dentro de la interfaz de Samsung.

Pero en la filtración de ayer, se desvelaba buena parte de la interfaz que seguramente veamos en la actualización del Galaxy S5 a Android L. Los cambios que se ven no son muy grandes a nivel visual, las interfaces son similares (algo más claras y planas, eso sí), pero trabajando sobre las últimas versiones en líneas generales.

Sí que pediría a Samsung un esfuerzo en el apartado de software, por hacerlo todo más claro y intuitivo, restar parte de esa dificultad que impera en muchos de sus usos. ¿Qué le pediríais vosotros al próximo Touchwiz?

En Xataka Android | Samsung Galaxy S5, imágenes y vídeo de su próxima actualización a Android L