Uno de los dispositivos más extraños y a la par interesantes que hemos visto en los últimos tiempos ha sido el YotaPhone, un teléfono con doble pantalla que ya pudimos probar en el pasado MWC2013, pero que finalmente no llegó a las tiendas de manera generalizada.
Ha pasado todo un año, pero en Yota Devices, el fabricante ruso tras este engendro, no han estado de brazos cruzados esperando una oportunidad, sino que han trabajado duramente en la segunda generación de su YotaPhone, un dispositivo que ha visto la luz en forma de prototipo en este Mobile World Congress 2014.
En Xataka Android hemos tenido la oportunidad de charlar con la gente de Yota mientras toqueteábamos uno de los prototipos de su nuevo YotaPhone, y las sensaciones no han podido ser más alentadoras.
Un smartphone normal por delante, una pantalla de tinta electrónica por detrás
En Yota se han centrado en mejorar todo lo posible para adecuarse a las demandas del mercado, y teniendo en cuenta que su teléfono se codeará con la gama alta no han escamitado. Así pues, la segunda generación del YotaPhone ha crecido para albergar una pantalla OLED de 5 pulgadas por delante, aunque la sorpresa está en el panel EPD (Electronic Paper Display) que tenemos detrás.
Este panel también recibe mejoras, y creciendo hasta las 4.7 pulgadas contará ahora con resolución qHD y sensor táctil, con lo que la interacción y sus posibilidades mejoran exponencialmente. Para ello, Yota espera que los desarolladores jueguen un papel importante, y ellos ya han hecho posible navegar por la interfaz o contestar un email directamente desde el panel trasero, con el consecuente ahorro energético que supone mantener apagado el panel OLED.
Nuevo y mejor hardware, ahora a la altura de la gama alta
La plataforma de hardware también recibe novedades, comandada en el nuevo modelo por un chipset Qualcomm Snapdragon 800 con procesador de cuatro núcleos a 2.3 GHz, que estará acompañado de 2 GB de memoria RAM y 32 GB de almacenamiento interno.
Las novedades llegan también a las cámaras, de 8 y 2 megapíxeles respectivamente la principal, con flash LED, y la frontal. El terminal cuenta con conectividad completa hasta LTE, todo el compedio de sensores habitual y Android para dar vida al equipo, animado por una batería de 2.550 mAh que no desentona si tenemos en cuenta que el YotaPhone es ahora un dispositivo con dos pantallas en 8.9 milímetros de grosor.
Además, la pantalla EPD da juego con la autonomía, y aunque no tenemos datos oficiales, sí nos comentaron desde Yota que las cifras que manejan los prototipos en ese aspecto son realmente buenas.
YotaPhone, la disponibilidad como tarea pendiente
No penséis que el primer modelo se quedó en agua de borrajas, pues YotaPhone estuvo ofreciendo el dispositivo en países como Rusia, Alemania, Francia, Austria, Suiza o España a un precio en torno a los 500 euros. Quizás el desconocimiento les ha privado de más repercusión, aunque esta nueva generación les augura mayores posibilidades de éxito.
Nos cuentan que pronto estarán presentes también en Reino Unido y en los Emiratos Árabes, y que aunque han vendido el terminal en Rusia con la posibilidad de devolverlo en un mes sin dar explicaciones, no han recibido de vuelta ningún dispositivo.
El reto está mejorar la producción y los tiempos que tardan en poner en el mercado los dispositivos, y si lo consiguen, seguramente el próximo año sigamos hablando de YotaPhone como un terminal muy interesante que ofrece algo diferente.
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