Xiaomi tenía algo que presentarnos hoy, todos estábamos esperando una renovación de su tope de gama pero el fabricante chino sigue bordeando la tangente y amplía con un nuevo terminal la serie Mi4. No ha habido sorpresas ya que casi toda la información se había filtrado días antes pero aún así ha sido capaz de sorprendernos.
Con el nombre de Xiaomi Mi 4c nos encontramos con un terminal que por especificaciones podríamos calificarlo de tope de gama. No está entre los más potentes del año pero nadie duda de la valía de los componentes que monta ni tampoco del buen hacer de la compañía. Lo diferencial, una vez más, vuelve a ser el precio. Agresivo, como de costumbre, en ese esfuerzo para ofrecer buenas prestaciones a un precio comedido.
Corazón de gama alta, cuerpo de gama media
En el diseño, Xiaomi vuelve a apostar por el plástico. Un diseño muy funcional (en diferentes colores) donde prima la funcionalidad sobre la estética. Por lo que se aprecia en las imágenes las sensaciones son parecidas a las del Mi 4i por ejemplo. Sus dimensiones son de 138,1 x 69,6 x 7,8 milímetros y un peso de 132 gramos. Un terminal con un tamaño muy ajustado si tenemos en cuenta que lleva una pantalla de cinco pulgadas.
En el panel nos encontramos algo bastante curioso: Xiaomi recurre a tres proveedores para ponerle un IPS LCD con resolución Full HD: Sharp, AUO y LG. Todas ellas vienen con tecnologías que ya hemos visto en otros móviles de la compañía: brillo extra para verla de día y un modo nocturno con el brillo muy bajo para leer sin consumir apenas batería y no dejarnos la vista.
En el procesador nos encontramos con lo esperado, Snapdragon 808. La RAM dependerá del almacenamiento y así el modelo de 16GB de memoria tendrá 2GB de RAM y el de 32GB contará con 1GB extra más de RAM. Estaremos atentos a la diferencia de precio pero probablemente merezca la pena pagar la diferencia extra.
En la cámara apuestan también por diferentes sensores y esta distinción puede ser clave aunque Xiaomi asegura que la calidad será la misma. Algunos modelos llevarán el Sony IMX258 mientras que otros montarán un S5K3M2 ISOCELL de Samsung. En la frontal, cámara de 5 megapíxeles con modo Belleza en el software para corregir imperfecciones faciales en los selfies.
En la batería el Mi 4c presume de 3.080 mAh de batería "de alta densidad". Este matiz nos hace pensar que esta vez han apostado por polímero de litio y no por ión. De ahí que a pesar de esta capacidad el terminal solo pese 132 gramos. Veremos qué tal en autonomía aunque MIUI en el software siempre ha gestionado de forma agresiva el consumo para que dure mucho.
La C de este Xiaomi Mi 4c es la letra del conector USB que lleva. Sí, tipo C, como en el OnePlus 2 pero con la diferencia de que en este terminal si tenemos sistema de carga rápida.
La clave está en tocar el lateral
Si Samsung con sus Edge puso mucho énfasis en usar los bordes de la pantalla para realizar diferentes acciones, Xiaomi aprovecha los marcos pero no, en esta parte del móvil no hay pantalla. En su lugar, hay unos sensores debajo del plástico que reconocerán cuando nuestra mano esté encima. Su nombre es Edge Tap.
Cuando pulsamos una vez nos llevará a la cámara de fotos. Si golpeamos dos veces será como pulsar el botón de Atrás. Útil, curioso pero nos deja algunas dudas: ¿cómo de sensible es? ¿será fácil pulsarlo por accidente? ¿se podrá configurar para realizar otras acciones? Suena bien, pero espero una personalización con cierta profundidad, como la de los botones táctiles del OnePlus 2 por ejemplo.
Xiaomi Mi 4c, precio y disponibilidad
El Xiaomi Mi 4c saldrá, como otros terminales de la compañía, en mercados muy selectos. De momento las reservas comenzarán en breve en China a un precio de unos 220 euros para el modelo de 2GB/16GB. Todavía no sabemos cuánto costará la configuración más alta del dispositivo.
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