Alcatel ha llegado al Mobile World Congress 2013 con la intención de hacerse un hueco en la gama media-alta con unos terminales que, por lo general, cumplen con las expectativas. Si bien no son comparables a los terminales de gama más alta, pueden tener su hueco en los que pidan menos prestaciones y un precio más asequible.
El Alcatel One Touch Idol X es sin duda una apuesta muy fuerte por la gama media sin renunciar por ello a una gran pantalla. Se nota muy ligero en las manos, con unos buenos materiales y firme, aunque este concepto se puede aplicar a toda la línea One Touch.
Otro terminal que puede dar mucho de que hablar es el Alcatel One Touch Scribe, un phablet que ofrece una muy agradable sensación de fluidez a pesar de contar con únicamente dos núcleos a 1.2GHz. El uso del stylus incorporado está muy bien implementado, aunque salvando las distancias con la competencia de gama alta, pero es ideal si no se quiere gastar mucho dinero en un phablet y se está dispuesto a aceptar sus limitaciones.
El Alcatel One Touch Star es un terminal un poco más modesto que sus compañeros, que al quedarse en 1GHz no posee tanta fluidez. Algo que también llama la atención, aunque no precisamente para bien, es que no tiene ese diseño personal de la empresa del resto de la línea, y los botones no se ven demasiado bien. Aún así, la experiencia es satisfactoria, pero nada del otro mundo.
Alcatel puede empezar a considerarse para este año como una muy buena alternativa en el campo de la gama media, la media-baja y la gama media-alta. Si saben jugar bien sus cartas y hacer buenos tratos con las operadoras podrían posicionarse y recuperar el territorio perdido que los smartphones le han quitado.
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