Pocos recordarán aquellos primeros smartphones Android, tan pequeños (para los usuarios de hoy en día), tan básicos, con el único "lujo" de una pantalla táctil que funcionaba más o menos bien, con unos píxeles que casi podías ver desde el edificio de enfrente, y sin embargo, son los responsables de que los móviles estén donde están ahora mismo.
Desde entonces han aparecido fabricantes, tecnologías y mejoras que hacen que nuestros smartphones sean lo que son hoy para bien y para mal. Probablemente hace cinco años nadie se imaginaba que los móviles serían lo que son ahora. Pero, si tenemos en cuenta los avances, ¿cómo serían los smartphones dentro de dos años?
Vamos a intentar especular un poco sobre cómo serán los móviles dentro de dos años de cada fabricante y, si acierto, en el 2018 podrás hacerme un altar para venerarme al tiempo que disfrutas de esos nuevos móviles de dentro de dos años. Mencionaré a los fabricantes más reconocidos y haré una mención especial que posiblemente te haga mucha gracia.
Samsung: más sensores, más potencia, mismo diseño
Desde que Samsung decidió unirse a Android, el diseño de sus terminales ha ido cambiando a pasos muy lentos, siempre con pequeños detalles que, sin embargo, daban la sensación de ser casi iguales a las generaciones anteriores para los usuarios. Una de las mayores críticas era el plástico de mala calidad que usaban, en contrapartida de otros fabricantes que usaban un plástico de mejor calidad.
El gran cambio vino con el Galaxy S6, que decidió dejar el plástico de lado para pasarse al cristal y metal. El resultado era un teléfono más bonito pero que daba la sensación de ser casi igual que su antecesor, quitando los materiales, claro. La subfamilia Edge también ha sido una gran sorpresa para los usuarios, que parecen haber acogido bien a este tipo de terminales.
Para el 2018 se espera que las pantallas totalmente planas desaparezcan del catálogo de de móviles de Samsung, quedando solo las pantallas 'edge'. Por supuesto, asistiremos a un incremento de potencia, ya sea gracias a chips de Qualcomm o a los suyos propios, pero jamás renunciarán a un aumento de potencia (ni ningún fabricante, todo sea dicho).
Será muy fácil que el fabricante coreano se invente algún sensor extra para meter en sus teléfonos (un sensor de azúcar en sangre, o un medidor de la salinidad del agua, o un escáner de juanetes), pero eso sí, si en varios años el diseño apenas ha evolucionado, en el 2018 no podemos esperar muchos cambios en este aspecto, siendo muy similares a los terminales que fabrica hoy en día.
LG: amante de las dobles cosas y amante de los los experimentos
LG es uno de los fabricantes más desconcertantes si buscas adivinar su futuro, y es que desde hace bastante tiempo toma caminos que nadie se estaba esperando. Su primer intento fue aquel LG Optimus 3D con su cámara 3D, pero siguió haciendo experimentos con un estilo propio, como la añorada botonera trasera inaugurada en el LG G2.
El cuero vegetal del LG G4, la minipantalla secundaria del LG V10 junto a su curioso material y la "modularidad" del LG G5 fueron varios de sus experimentos más recientes, aunque sin olvidarnos de la familia G Flex. A LG siempre le ha gustado experimentar, y esto posiblemente se vea reflejado en el futuro.
Es muy difícil predecir el futuro de los móviles de LG, porque tan pronto puede iniciar nuevos y curiosos proyectos como abandonar los que tiene en marcha ahora mismo. El recientemente presentado LG V20 ha abandonado los LG Friends, pero nadie dice que en el LG G6 puedan volver, quizás sean algo exclusivo de la familia G, dejando a la familia V con características propias.
Adivinar cómo serán los móviles de LG en el 2018 es casi imposible, más allá de especular que seguirán apostando por las cámaras dobles y unas baterías extraíbles a pesar de usar metal como material de construcción (véase el LG V20, de metal y tapa trasera extraíble para acceder a la batería).
HTC, si es que sigue existiendo
HTC es el primero hijo de Android, y durante un tiempo disfrutó de la grandeza del éxito. Fue el responsable de los primeros Nexus y, antes de eso, del primer smartphone Android, el HTC Dream, o G1, según mercados. El éxito que estaba empezando a tener el sistema operativo rápidamente elevó a HTC a rozar la gloria, hasta que aparecieron competidores.
Samsung, LG y Sony aparecieron para competir en el mercado de la telefonía, abandonando los sistemas operativos que usaban hasta entonces, y empezó a convertirse en una guerra en el que el fabricante que mejor supiera vender sus terminales ganaría la corona. No fue HTC el ganador y, con el tiempo, esto le ha pasado factura, hasta quedar en la situación tan delicada que atraviesa hoy en día.
Tan delicada es su situación que no podemos adivinar a ciencia cierta si HTC seguirá fabricando smartphones o se retirará a un mercado donde haya menos competencia. Pero vamos a suponer que se va a quedar 100% seguro, que prentende seguir el camino que les ha llevado a construir el HTC 10, un terminal muy infravalorado por el público.
A nivel de diseño, quizás su punto más fuerte, hará algunas evoluciones, eso sí, no muy grandes para no perder su identidad, buscando soluciones para mejorar su cámara (un terreno en el que hay mucha competencia) y estar a la altura en términos de potencia. Si quieren volver a ser lo que eran, tendrán que fabricar terminales de gama media que sean realmente atractivos, sobre todo económicamente.
Sony, probablemente más de lo mismo
Sony es otro de los veteranos de Android, cuando aún se encontraba asociado a Ericsson. Desde su inicio en Android, todos sus smartphones han sido de la familia Xperia, tanto durante el tiempo en el que era Sony-Ericsson como ahora que es simplemente Sony (tras la separación de ambas compañías hace unos años).
En el caso de Sony, sí que ha ido cambiando con el tiempo, ofreciendo diversos productos con diseños muy diferentes y conceptos interesantes, como el teclado QWERTY deslizable. Desde el nacimiento de la familia Xperia Z, sin embargo, su diseño apenas ha evolucionado, y con la familia Xperia X el camino ha sido el mismo.
"Si algo funciona, mejor no cambiarlo" dicen muchos, pero llega un momento en el que la gente se cansa de esos "no cambios", y esto le ha llevado a una situación difícil en la actualidad. Por desgracia no veo a la compañía haciendo un cambio lo bastante fuerte como para que el público diga "ahora sí, Sony, ahora has innovado de verdad".
Por supuesto, un terreno en el que siempre trabajan es en el fotográfico, sobre todo porque fabrican sus propios sensores, y en el 2018 seguirán buscando la forma de liderar el apartado fotográfico. En cuanto a diseño, como ha ido pasando estos últimos años, difícilmente harán un cambio radical, si acaso sutiles cambios estéticos que apenas se notarán a primera vista.
Bonus: Turing: con tres procesadores en el 2018, porque dos lo mismo se les quedan cortos
Turing es una compañía jóven, y cuyo primer terminal es el Turing Phone, más duro que el acero y prácticamente 'inhackeable', que está sufriendo muchos retrasos. Ahora bien, el terminal que le está llegando a la gente es de evaluación, diciendo la compañía que los sustituirán por la versión final totalmente gratis.
El motivo es que quieren meter Swordfish OS para que su Turing Imitation Key y el sensor de huellas estén activos (Sailfish OS no soporta las huellas dactilares aún), y aprovecharán para meterle el Snapdrago 820. Y dicen que harán el cambio gratis, ya veremos. También sabrás que hace unos días dieron a conocer a algunos el disparatado Turing Phone Cadenza, pues espera, que ahora viene lo bueno.
Ayer me llegó un mail de los señores de Turing en el que anunciaban un futuro terminal para el 2018 llamado Turing Monolith Chaconne, cuya pantalla pasaba a ser 4K de 6,4 pulgadas, 3 procesadores Snapdragon 830, 18 GB de RAM (3 módulos de 6 GB), 1,2 TB de almacenamiento (3 módulos de 256 GB internos y otros dos de 256 GB de tarjetas microSD) y aún más batería (3.600 mAh de la de grafeno, 2.400 mAh de Li-Ion y su pila de hidrógeno).
Al parecer incorporará algo llamado A.L.A.N, que ya anunciarán qué es. Es decir, el futuro según Turing son "móviles" (lo pongo entre comillas porque con ese tamaño...) con mucho de cada componente, su llamado Liquidmorphium en versión mejorada que parece realmente resistente y probablemente tenga unos precios astronómicos de la muerte.
Dato curioso a este respecto, en ese disparatado e-mail decía que habían adquirido la fábrica de Salo (Finlandia), que es la misma que usaban Microsoft y Nokia para sus prototipos, para fabricar en los próximos meses los prototipos del Turing Phone Cadenza. Dudo muchísimo que, de construirse tal máquina, llegue con semejantes especificaciones.
He metido básicamente a los fabricantes más renombrados y que más historia tienen en el mundo Android junto a este chistoso bonus (porque hasta que no lo vea no me creeré que se atrevan a fabricar móviles con 2 y 3 procesadores en su interior). Pero como cada uno tiene su propia visión del futuro, ¿cómo crees que serán los smartphones en el 2018?.
En Xataka Android | Samsung Galaxy Note 7, review con vídeo
Ver todos los comentarios en https://www.xatakandroid.com
VER 5 Comentarios