Cuando compramos un nuevo dispositivo intentamos cuidarlo al máximo, protegiéndole tanto de los golpes como de los posibles roces que pueda sufrir la pantalla. Hoy en día con soluciones como Gorilla Glass los posibles arañazos cotidianos no preocupan tanto ya que las pantallas han evolucionado en cuanto a su resistencia, pero una caída o un golpe sin mucha importancia puede tener un fatal resultado.
LG y Samsung están estudiando la viabilidad de este material para futuros smartphones y tablets de más alta gama, y los rumores apuntan a que las pruebas ya han comenzado. Los contratiempos son el elevado precio para producirlo en grandes cantidades y la dificultad de trabajarlo por su dureza. Su punto a favor es que solo el diamante es más duro que él por lo que su resistencia al paso del tiempo sería muy buena.
De todas formas no es la primera vez que vemos en el mercado de la telefonía este material ya que marcas como Vertu ya venían utilizándolo en las pantallas de sus dispositivos de alto coste. Apple por su parte lo utilizó en el cristal que cubre la cámara en su iPhone 5s, pero no es lo mismo utilizarlo para este fin que para cubrir el frontal de un terminal de 5 pulgadas.
Este movimiento de las empresas tecnológicas puede haberse producido por el descubrimiento de un nuevo método para abaratar los costes de producción del zafiro, pero los rumores apuntan a que estos planes son a medio-largo plazo. Y yo me pregunto, en el hipotético caso de que el cristal se rompa ¿cuánto nos costaría reemplazarlo viendo que actualmente esta reparación no es ni mucho menos económica?
En Xataka | El reto del zafiro como material para las pantallas de los smartphones
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