Oímos con frecuencia eso de que todos los teléfonos Android son iguales. No faltan razones para esta argumentación, aunque de vez en cuando nos encontramos con smartphones que salen de lo común. Para que no caigan en el olvido, los recordamos en esta serie sobre teléfonos Android que nos emocionaron en su día.
Hoy recordaremos al Samsung Galaxy Beam, un terminal que no mucha gente conoce pero que resulta curioso incluso hoy en día. ¿Su principal peculiaridad? Incluía un proyector, con el cual podías proyectar la pantalla de móvil a cualquier pared o panel.
Especificaciones del Samsung Galaxy Beam
Samsung Galaxy Beam | |
---|---|
Pantalla | 4" TFT, 480 x 800 píxeles (233 ppi) |
Tamaño y peso | 124 x 64,2 x 12,5 mm, 145,3 g |
Procesador | NovaThor U8500 |
RAM | 768 MB |
Almacenamiento | 8 GB + microSD |
Android | 2.3.7 |
Cámaras | Trasera: 5 MP Frontal: 1.3 MP |
Batería | 2000 mAh |
Otros | Proyector |
Fecha de lanzamiento | Julio de 2012 |
Las especificaciones anteriores desde luego no deslumbran hoy en día, aunque deberemos hacer el esfuerzo mental de trasladarnos a 2012 para ponerlas en contexto. Se presentó en el MWC de ese año, y unos meses más tarde vería la luz el Samsung Galaxy SIII con 1 GB de RAM, quadcore Exynos de 1,4 Ghz y pantalla HD de 4,8 pulgadas.
No eran especificaciones punteras para su época, ni falta que hacía. La peculiaridad del Samsung Galaxy Beam no estaba en su potencia o cámaras, sino en poder hacer algo que el resto no podía. Estamos hablando, por cierto, del segundo Galaxy Beam, el I8530. Dos años atrás, en 2010, hubo un Galaxy Beam I8520 igual de curioso, pero que tenía un diseño menos atractivo que lo hacía parecer un ladrillo.
Con el Samsung Galaxy Beam I8530, Samsung modificaba la idea del proyector que es también un teléfono por un teléfono que también es proyector. Es también regordete, sí (la diferencia entre ambos son 2,4 mm) pero tiene más forma de teléfono.
¿Qué tenía de especial?
Con especificaciones de gama media, lo que tiene de especial este teléfono es evidente: el proyector. En cierto modo camuflado en el borde superior de la pantalla, teóricamente te permitía convertir cualquier pared en una pantalla con la que disfrutar del contenido que ves en tu móvil. La información oficial de Samsung aseguraba que con este proyector podías proyectar imágenes hasta 50 pulgadas.
Se trata de un picoproyector de 15 lumens y resolución 640x360 que probablemente no te sean suficientes para crearte un Home Cinema con el móvil, pero que en una habitación totalmente a oscuras y con unas condiciones ideales, podían dar mucho juego.
El Galaxy Beam contaba con su propia aplicación de proyector con la cual gestionar qué se proyectaba, aunque la verdad es que no tenía mucha ciencia: lo que se veía en la pantalla de móvil, se emitía por el proyector sin retraso visible, con una pulsación de botón (físico, en uno de los laterales).
Podrías, por tanto, manejar el móvil y ver el resultado en la pared, aunque todo esto sin moverlo lo más mínimo, claro. Como el móvil no se puede rotar ni mover, es la propia aplicación la que determina si la imagen se ha de girar o no, de modo que se pueda emitir imagen en vertical o en horizontal.
Por supuesto, este proyector era un devorador de batería y se sobrecalentaba durante un uso continuado, pero aun así los 2.000 mAh podían estirarse hasta unas cuatro horas de proyección siempre y cuando fuera con algo relajado y no un juego exigente.
¿Existe algo parecido hoy en día?
Dos años después de este Galaxy Beam, Samsung lo volvió a intentar de nuevo con el Samsung Galaxy Beam 2, con potencia renovada pero bajo la misma premisa de proyector montado sobre especificaciones del montón. Desde entonces Samsung no ha vuelto a incorporar proyector a sus teléfonos, por ahora.
Aunque existen varios proyectores con Android, especialmente firmados por ZTE como el Projector Hotspot de 2014, ZTE Spro 2 o la tablet ZTE Spro Plus o el novedoso Sony Xperia Touch, esto de meter un proyector en un teléfono no se ha vuelto a ver demasiado, salvo en el concepto del Lenovo Smart Cast Laser que parece que al final quedó en nada.
La única excepción a la regla llega en la forma de añadido. Con el Moto Mod Insta-Share Projector puedes convertir los Motorola compatibles en proyectores. Cuenta con resolución 854 x 480, más aceptable que la del Beam, 50 lumens y viene con una batería de 1.100 mAh. Eso sí, barato no te va a salir, pues cuesta 299 euros en Amazon, y sin teléfono.
En Xataka Android | Aplicaciones con las que flipaste en su día: Swype
Ver todos los comentarios en https://www.xatakandroid.com
VER 0 Comentario