De entre todos los poseedores de un smartphone, sólo unos pocos afortunados no habrán tenido que sentir que parte de su corazón se rompía con alguna parte de su terminal tras una caída o golpe accidental. Y seguro que más de uno de los desdichados que han visto su móvil cruelmente lesionado ha soñado con que fuera autorreparable y así no tener que dejarse una pasta en arreglarlo.
LG tuvo esa idea con las dos generaciones del LG G Flex, cuya espalda se autorreparaba al sufrir algún rasguño. Normalmente, lo que más nos preocupa es la pantalla, pero por la naturaleza del cristal, hacer algo así era harto complicado. No obstante, Motorola parece estar intentando fabricar un móvil cuya pantalla se autorrepare, según una de sus patentes.
Eso sí, la propuesta que hace Motorola en su patente es mucho más compleja de "oh, mi pantalla se ha rayado y se está autorreparando". Para empezar, el panel no sería de cristal, sino de un polímero plástico similar a la del Moto Z2 Force, a la que el fabricante ha llamado 'smart glass'. Y bueno, si esto se lleva a cabo, el nombre no le viene grande que digamos.
Así es cómo se llevaría a cabo la autorreparación de la pantalla
Para que la reparación se pueda llevar a cabo, el móvil tiene que disponer tanto del hardware como del software necesario, es decir, que no es montar la pantalla y listo, el proceso sería bastante complejo. Según muestran en la pantente, el teléfono equiparía unos sensores bajo la pantalla que detectarían algún tipo de deformación, como puede ser una rayadura o una pequeña grieta, por ejemplo.
Cuando se detecta esa deformación, el terminal lo notificará al usuario, que podrá autorizar la autorreparación y rodear con el dedo el área afectada, tal y como se muestra en la imagen superior. Una vez hecho esto, se le pide al usuario que no use el teléfono durante el proceso de reparación, y el motivo es simple, la pantalla se va a calentar mucho.
Según describe Motorola, el calor se genera para reordenar las partículas de esa zona de la pantalla y hacer desaparecer la deformación. Ahora bien, también advierten que no podrá reparar completamente cualquier tipo de rotura, es decir, que si es muy grave, el móvil hará lo posible, pero quedará rastro.
La idea suena muy bien, pero...
Sin duda, tener un móvil cuya pantalla se autorrepare sería de lo mejor para nuestro corazoncito y nuestro bolsillo, pero se puede ver que, por ahora, hay una pequeña laguna en ese plan. Dado que para reparar la pantalla debe generarse bastante calor, ¿esto no afectará al resto de componentes del teléfono?
Con la preocupación tan grande que había acerca del calentamiento de nuestro móvil, que haya un componente que genere una gran cantidad de calor puede preocupar. Por suerte, la solución sería tan sencilla como aislar térmicamente el resto de piezas para que no se vean afectadas, aunque eso pueda afectar ligeramente al grosor del teléfono.
Hablando del grosor, añadir componentes extra haría que el teléfono fuera más grueso, y con la obsesión de algunos de ofrecer un terminal fino, si usa esta característica, todos sabemos qué parte sufriría un recorte: la batería. Personalmente, yo sería capaz de vivir bien con un móvil con 10 mm de grosor si con eso gano una buena autonomía y el móvil me dice "tranquilo, tú relájate que yo me encargo" cada vez que la pantalla se raya o agrieta.
Si esto finalmente se convierte en realidad, sin duda puede ser un avance muy interesante en la tecnología móvil, que dejará de centrarse sólo en ofrecer funciones y mejoras en cuanto a experiencia de usuario, sino que incrementará la resistencia de nuestros dispositivos. ¿Crees que algún día veremos un móvil con pantalla autorreparable?
Vía | Phone Arena, SlashgearEn Xataka Android |
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