El ratón y el teclado tienen fecha de caducidad. Mientras esperamos que proyectos como el de Neuralink, Alter Ego o, incluso, las investigaciones en el misterioso Building 8 de Facebook fructifiquen para traernos un nuevo modo de comunicarnos con dispositivos electrónicos que evite las ya anticuadas interacciones físicas, nos queda el recurso de los asistentes de voz.
Siri, Alexa, Cortana, Google Assistant, quizás Bixby... todos los asistentes virtuales presentan ventajas muy claras respecto a las interacciones táctiles. Un comando de voz nos ahorra tiempo, en la gran mayoría de ocasiones. Pero todos estos asistentes fallan en un punto clave: por mucho que se esfuerzen no suenan suficientemente humanos.
Es cierto que el esfuerzo que ha hecho Google Assitant, por ejemplo, para entender el contexto de una conversación ha hecho que este asistente nos ofrezca un diálogo mucho más natural, pero está aún muy lejos de entender en qué tono le hemos hecho la pregunta o qué estado anímico mostramos exactamente. Son datos que no tienen mucho sentido para un ordenador, pero que en el ámbito de una relación humana nos ofrece la mayor parte de la información de cada mensaje.
Google Assitant es muy bueno entendiendo el contexto, pero no entiende nuestras emociones.
En busca de un asistente emocional
Huawei reconoce este problema comunicativo en los asistentes y afirma que está trabajando en su solución: un asistente virtual que, gracias a la inteligencia artifical, sea interactivo emocionalmente.
En una entrevista con la CNBC, el vicepresidente de ingeniería de software, Felix Zhang, explica que quieren ofrecer esas interacciones emocionales que conviertan un simple y aséptico intercambio de información en una relación más profunda con nuestros asistentes y, consecuentemente, con nuestros dispositivos electrónicos.
"Creemos que, en el futuro, todos nuestros usuarios finales desearán poder interactuar con el sistema en el modo emocional. Esta es la dirección que vemos en el largo plazo."
El modo emocional de su futuro asistente podria incorporar datos como la expresión facial, contexto, entonación de la voz y patrones de comportamiento que ofrecerán los matices necesarios a la máquina para responder de la forma más adecuada a cada interacción. La Inteligencia Artificial Emocional no es un invento nuevo: ya hace un tiempo que se está estudiando.
Sí: la película Her les ha inspirado
Zhang no esconde que la obra de Spike Jonze del 2013, Her, ha sido una inspiración para ellos. Recordemos que en su trama, el protagonista se enamora de su asistente virtual, Samantha. Felix Zhang apunta que, a nivel tecnológico, "Samantha es un sueño para todos los ingenieros" y que sus capacidades emocionales permiten, incluso, "deshacerte de tu novia".
El asistente virtual en el que trabaja Huawei también será un compañero inseparable. James Lu, director de gestión de productos de inteligencia artificial en Huawei, añade que el asistente virtual emocional intentará mantener una conversación el máximo de tiempo posible para que el usuario no llegue a sentirse solo. Para ello, añadió, habrá que dotarle de "un gran cociente de inteligencia" para luego ampliarle "el cociente emocional".
Huawei asegura que su asistente virtual, que lanzaron el 2013, está siendo usado actualmente por 110 millones de usuarios de forma diaria.
Vía | CNBC
En Xataka: Los psicólogos que trabajan en Google y Apple para que sus asistentes virtuales respondan a la depresión, el dolor y el suicidio
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