HTC sólo actualizará a Jelly Bean dispositivos con más de 512 MB de memoria RAM

Hace meses que supimos que HTC preparaba la actualización a Android 4.1 Jelly Bean para sus HTC One X y One S, y la propia compañía se encargó de confirmarlo durante la presentación del último dispositivo que han lanzado en Europa, el HTC One X+. Sin embargo, todavía no hemos visto actualizar ningún terminal, y las suspicacias comienzan a hacerse cada vez más fuertes.

Parece que las actualizaciones para los One son inminentes, aunque del resto de la gama nada se ha hablado hasta la fecha. Sin embargo, las últimas informaciones sobre las actualizaciones de la firma taiwanesa llegan directamente de la web de HTC, y es que en la ayuda sobre Android 4.1 Jelly Bean se puede encontrar la respuesta a la duda que todos tenemos.

What devices will not get Android 4.1? We work hard to ensure each of our products has the optimal user experience and therefore some products will remain at their current version of Android. In general, devices with 512MB RAM or less will not be upgraded to Android 4.1. At present, these devices include the HTC One V and the HTC Desire C. As we identify other devices that will not be upgraded, we'll provide updated information, It should be noted that upgrades are not the same thing as ongoing support. Devices not being upgraded to Android 4.1 will still get software improvements, security fixes, and technical support.

Esto viene a explicar lo de siempre, que HTC no quiere actualizar ningún terminal sin asegurar una experiencia de usuario óptima, y que esto implica que adaptar HTC Sense a las nuevas versiones tiene unos requerimientos de hardware que hacen que los dispositivos con 512 MB de memoria RAM no vayan a recibir Android 4.1 Jelly Bean de manera oficial.

Esta lista incluye los HTC One V y HTC Desire C, y además HTC estudiará si otros terminales podrán o no ser actualizados para avisar en consecuencia. Además, aseguran que, aunque la versión de Android no sea actualizada, si continuarán recibiendo soporte en cuanto a mejoras de interfaz, parches de seguridad y solución de problemas técnicos.

Otro caso más que podría explicar la decadencia de HTC, y es que, por mucho que HTC Sense necesite recursos, una política que implica dejar sin actualización terminales presentados durante este mismo año no es de recibo con sus propios clientes, más aún cuando la comunidad ya ha portado varias ROMs con Jelly Bean a diferentes dispositivos con hardwares similares, e incluso a los mismos que HTC descarta.

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