Tras un año con altibajos, HTC ha decidido coger el toro por los cuernos y volver a los más alto en el 2012. De un montón de terminales hemos pasado a una gama más reducida, pero también de más calidad. El abanderado de esta nueva generación es el HTC One X, un terminal que combina potencia con un diseño fino y con acabados realmente buenos.
Nuestros compañeros de Xataka han hecho un completo análisis del terminal. Un teléfono delgado cuyas principales virtudes las encontramos en la cámara de fotos y la pantalla Super LCD2. Pese a no haber recibido finalmente el Snapdragon S4, la versión europea viene con Tegra 3, el HTC One X viene pisando fuerte para convertirse en uno de los referentes dentro de Android.
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