Es el mayor problema de la plataforma Android, y es que el sistema operativo móvil de Google siempre ha sufrido la falta de actualizaciones de ciertos fabricantes a muchos de sus terminales. Sin embargo, hace tiempo que Google trabaja en evitar la fragmentación, aunque si la invitación a mantener una interfaz tan buena como "Vanilla" en lugar de otras propietarias no es suficiente, también está dispuesta a cosas más serias.
El primer golpe de autoridad se lo ha llevado Acer, y es que la compañía del buscador acaba de prohibir al fabricante taiwanés lanzar un smartphone dirigido al mercado chino.
La razón es simple, preservar el ecosistema de la plataforma, y es que según Google el dispositivo cuenta con diferencias técnicas que podrían causar problemas a los desarrolladores, además de utilizar Aliyun, un sistema operativo basado en Android pero incompatible con muchas aplicaciones de Play Store.
En esta tesitura, parece que Alibaba, la compañía propietaria de Aliyun, no está muy de acuerdo con la decisión de Google al esgrimir que su sistema operativo utiliza partes Android pero no debería considerarse una versión de éste.
Google por su parte defiende que Acer pertenece a la Open Handset Alliance, con lo que está comprometido por contrato a no lanzar al mercado terminales basados en Android que sean incompatibles total o parcialmente con el ecosistema androide.
Lejos de obtener buenas críticas por un movimiento agresivo como este, Google ha suscitado un debate sobre la condición Open Source de Android, y es que algunas voces consideran que la Open Handset Alliance es una herramienta de la compañía de Mountain View para controlar desde la sombra el acceso al código de Android.
Bueno o no para sus intereses, lo cierto es que parece que Google está dispuesta a no perder control sobre su sistema operativo, sobre todo en un mercado de por bastante heterogéneo como el chino.
En Xataka Android | Android no está tan fragmentado como la gente piensa, según Localytics Vía | Cinco Días