El debate sobre procesadores que tiene lugar en las oficinas centrales de Samsung en Corea debe estar siendo apasionante. Es fácil imaginar un buen puñado de ingenieros con bata blanca impecable, sugiriendo el Qualcomm Snapdragon 820 para el próximo Galaxy S7, mientras que otros tantos defienden a capa y espada el Exynos marca de la casa.
A efectos de márgenes, Samsung saca más tajada en cada smartphone vendido con cerebro Exynos, aunque la compañía ha afirmado de forma oficial en varias ocasiones que no abandonarán a Qualcomm como proveedor de procesadores. El “Galaxy dilema” pasa ahora por decidir qué procesador llevará el próximo Galaxy S7. Los laboratorios de Samsung echan humo...
Allá por 2010 Samsung montó su primer Exynos en el ya clásico Galaxy S, que fue además el motor de otros dispositivos como la Galaxy Tab. Mucho ha llovido desde entonces y aunque Samsung ha seguido trabajando y apostando intensamente por sus propios chips, la fiabilidad, el prestigio y la potencia de los Qualcomm siempre ha acompañado sus grandes lanzamientos.
La compañía coreana ha apostado por Exynos en los Galaxy S, S2, algunos modelos del S3 y el S4, y en los últimos Galaxy S6. Qualcomm ha estado presente de forma exclusiva o como procesador variable según mercado en el Galaxy S3, S4 y S5. Para el próximo Galaxy S7, Samsung podría introducir el nuevo Qualcomm 820 con el que ya se encuentra trabajando.
Las últimas noticias que llegan desde Corea revelan que Samsung está llevando a cabo en sus laboratorios pruebas intensivas de rendimiento con el Qualcomm 820. Parte de dichas pruebas van destinadas a comprobar que este nuevo procesador no repite los problemas de calentamiento del Qualcomm 810. Ese fue uno de los motivos por el que no fue colocado en el Galaxy S6 o en otros terminales como el G4 de LG, que optó por un Qualcomm 808.
El Snapdragon 820 de Qualcomm es una mala bestia con ocho núcleos y arquitectura de 64 bits. El Soc incluye una gráfica Adreno 530, compatibilidad con memora Ram LPDDR4 y conectividad LTE Cat 10. Quizá uno de los puntos más importantes de este chip y que más podría equilibrar la balanza a su favor en detrimento de Exynos, es que Qualcomm ha conseguido un aumento de entre un 20 y un 40% en su potencia, reduciendo el consumo energético en un 45%. Los calentones del Snapdragon 810 deberían quedar en un mal recuerdo con este 820.
Samsung parece no tenerlo claro. Hasta comienzos de 2016, fecha en que se espera sea presentado el Galaxy S7, los coreanos tienen tiempo para hacer cuentas y testeos de sobra. ¿Qualcomm o Exynos? Que nadie se impaciente, cuando Samsung tome la decisión, alguna ficha interna o informe filtrado nos sacará de dudas mucho antes de su presentación.
Vía | DreamX (en coreano)
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