El fabricante francés especializado en teléfonos ultrarresistentes renueva su gama de dispositivos con un nuevo móvil y una nueva tablet. Fiel a sus principios, el recién estrenado Crosscall Core-X5 hace gala de una coraza a prueba de accidentes que protege un hardware que, sin ser potente, mantiene una calidad media bastante decente.
Que se caiga el móvil al suelo es una de las grandes pesadillas de quienes llevamos en el bolsillo un smartphone "corriente". Entrecomillamos el adjetivo porque existe un tipo de smartphones poco habitual que apuntan a la resistencia como una de sus principales cualidades; mercado al que se dirige Crosscall, una marca con un catálogo a prueba de inclemencias. ¿Que no quieres preocuparte de lo que le pase a tu teléfono? Pues échale un vistazo al Core-X5.
Ficha técnica del Crosscall Core-X5
Crosscall Core-X5 | |
---|---|
PANTALLA | LCD IPS 5,45 pulgadas (18:9) Resolución de 720 x 1.440 píxeles (HD+) |
PROCESADOR | Snapdragon 665 |
RAM | 4 GB |
ALMACENAMIENTO | 64 GB + microSD hasta 512 GB |
SOFTWARE | Android 11 |
CÁMARA TRASERA | 48 megapíxeles |
CÁMARA FRONTAL | 8 megapíxeles |
BATERÍA | 4.940 mAh |
CONECTIVIDAD | Dual SIM 4G LTE |
OTROS | Protección IP68 |
DIMENSIONES Y PESO | 163 x 78 x 14,5 mm 256 gramos |
PRECIO |
Crosscall Core-X5
Una coraza indestructible para un hardware con ciertas dudas
El Crosscall Core-X5 hereda el buen hacer de generaciones anteriores sin evolucionar en exceso detalles clave del hardware, como es el caso del procesador. Sin duda es el aspecto más negativo del teléfono, al menos sobre el papel: el Snapdragon 665 incluido tiene ya tres años de antigüedad, demasiado tiempo para un SoC. Eso sí, es un procesador que posee las garantías del programa Android Enterprise Recommended: el Crosscall Core-X5 está certificado.
La pantalla del teléfono no es exagerada en tamaño, que para eso el propio móvil es grande de por sí: 6,45 pulgadas de diagonal con una resolución HD+ de 720 x 1440 píxeles. El Crosscall Core-X5 carece de recortes para su panel LCD IPS: la cámara frontal de 8 megapíxeles se ancla en el marco superior del teléfono.
Para la cámara posterior, Crosscall apuesta por un sensor de 48 megapíxeles que se enclava en un módulo trasero junto a su flash LED. El móvil incluye opción directa de linterna así como cuatro botones programables; para, por ejemplo, lanzar directamente la app de cámara. Ésta no ofrece exagerados ajustes, ni manuales ni lúdicos.
El hardware es algo básico, sí, a ello contribuyen los 4 GB de memoria RAM y 64 GB de almacenamiento (con opción a SD Card y bandeja de SIM triple). No obstante, lo importante del Crosscall Core-X5 es su resistencia: la armadura que protege el teléfono le permite resistir la climatología adversa los golpes y hasta los pequeños incidentes en el entorno laboral. Posee protección IP68, todos los conectores quedan estancos, incluye certificación militar y un índice de reparabilidad muy alto: 9,1 de 10.
En términos de hardware hay otra mala noticia: el Crosscall Core-X5 parte con Android 11 y con la promesa de que actualizará pronto a Android 12. Crosscall mantiene un aspecto puro de Android (bastante cercano a AOSP, aunque con las apps de Google) e incluye una batería de 4.940 mAh. Dado lo contenido del hardware, la autonomía debería de ser holgada.
Precio y disponibilidad del Crosscall Core-X5
El último teléfono ultrarresistente de la marca ya está disponible para su adquisición en España: el Crosscall Core-X5 cuesta 549,90 euros en la tienda oficial del fabricante. Está disponible sólo en color negro y con una única configuración: 4/64 GB.