Pixel 6a vs Pixel 6 y 6 Pro: todas las diferencias y qué modelo elegir

Conocíamos ya los Google Pixel 6 y Pixel 6 Pro, los dos teléfonos de más alta gama de la compañía de Mountain View. Sin embargo, nos quedaba por conocer a su acompañante de rango más comedido, el Google Pixel 6a. Los tres están ya en el mercado, ya que el Pixel 6a acaba de ser lanzado tras haber sido presentado hace unos meses en la Google I/O 2022.

Teniendo ya los tres modelos para elegir en el catálogo, es momento de ponerlos frente a frente y poder ver de forma clara sus parecidos y diferencias. Y es que, como ya intuirás, son modelos con muchas semejanzas, pero con algunos cambios clave que determinarán si es más óptimo comprar uno u otro. Lo vemos todo en este post.

Un patrón de diseño común para los tres

Probablemente nadie acabe decidiéndose por la compra de un móvil solo por su estética, pero tampoco en el sentido inverso alguien compraría un móvil cuyo diseño le horrorice. Este es punto muy subjetivo y elegir si son bonitos o feos es cuestión de cada uno, lo que sí es objetivo de decir es que los tres tienen un molde común.

Parten con evidentes diferencias en tamaño, siendo el Pixel 6a el modelo más liviano con 178 gramos, 38 menos que los 210 gramos del Pixel 6 Pro, teniendo entre medias los 207 gramos del Pixel 6. Acorde a ello van sus pantallas, de las cuales hablaremos más adelante.

Lo que se ve de forma evidente es que los tres dispositivos tienen una estética 'muy Google', con una parte frontal protagonizada por la pantalla y alterada únicamente por un agujero en pantalla para la cámara y unos bíseles que son escuetos, aunque ligeramente más pronunciados en el Pixel 6a. En la trasera nos encontramos una estética plana que solo se ve alterada en la parte superior por el particular módulo de cámaras (dos lentes en los 6a y 6, tres lentes en el 6 Pro).

Pantallas de gran calidad, pero con diferencias a destacar

Los tres dispositivos cuentan con paneles de muy buena calidad, teniendo AMOLED para los Pixel 6a y 6 y del tipo P-OLED para el Pixel 6 Pro. A priori estas diferencias de tecnología de pantalla no radican más que en el tipo de construcción, aunque en ellas sí que podemos encontrar diferencias que nos hacen ver que estamos ante distintos móviles.

El tamaño y tasa de refresco va en aumento en cada modelo, teniendo 6,1 pulgadas y 60 Hz en el Pixel 6a, 6,4 pulgadas y 90 Hz en el Pixel 6 y 6,71 pulgadas con 120 Hz de tasa de refresco en el Pixel 6 Pro. También podemos observar diferentes resoluciones a medida que avanzamos al modelo mayor. Tenemos un buen FullHD+ en los modelos 'básicos', mientras que el 'Pro' ofrece una resolución QuadHD+ que es de lo mejor que podemos encontrar en el mercado.

En estas pantallas nos encontramos un lector de huellas óptico idéntico en los tres modelos. El hecho de que sea de esa clase y no ultra sónico hace que falle más de lo que nos gustaría y especialmente en condiciones de exteriores con mucha luz.

Ambos cuentan con el mismo chip de Google, aunque diferente RAM

Google aprovechó esta generación de sus smartphone para lanzar su primer chip propio, el Google Tensor. Este cuenta con una GPU de hasta 20 núcleos para renderizado, que va a conjunto con un doble núcleo Cortex X1 a 2,8 GHz, otros dos núcleos Cortex A76 a 2,25 GHz y hasta cuatro núcleos Cortex A55 a 1,8 GHz, los tres Pixel 6 comparten procesador.

Este procesador ya nos ha dado alegrías en los Pixel 6 y 6 Pro en asuntos como el tratamiento por software de la fotografía, siendo nuevamente teléfonos de Google los que mejor se desenvuelven en este apartado. Aunque, eso sí, la memoria RAM que acompaña a ese procesador va de los 6 GB del Pixel 6a a los 12 GB del Pixel 6 Pro, pasando por una versión intermedia de 8 GB en el Pixel 6.

Y aunque no estrictamente esté relacionado con el rendimiento, es digno de mención las memorias para el almacenamiento interno que montan estos dispositivos. Y más si tenemos en cuenta que no admiten ampliaciones con tarjeta microSD. El Pixel 6a tiene una única configuración de 128 GB, mientras que el Pixel 6 admite esta y otra de 256 GB. El Pixel 6 Pro por su parte admite ambas configuraciones y suma también una tercera opción de hasta 512 GB.

Muchos parecidos y alguna diferencia clave en cámaras

Empezamos hablando de una cámara frontal que, pese a haber indicios de que tiene desbloqueo facial, parece deshabilitado por software. Lo que sí ofrecen es una lente de 8 megapíxeles en los modelos 6a y 6, mientras que el modelo más avanzado mejora esta resolución alcanzando los 11,1 megapíxeles para mejorar todavía más nuestros Pixel.

Mejores especificaciones nos encontramos en las cámaras traseras. Nos encontramos una doble cámara tanto para el Pixel 6a como para el Pixel 6, aunque con diferencias en la lente principal. El '6a' monta una lente de 12,2 megapíxeles acompañada de un gran angular de 12 megapñixeles. Los '6' y '6 Pro' suben la apuesta con una principal de 50 megapñixeles con un gran angular que, en este caso, sí que es el mismo: 12 megapíxeles.

Es en el apartado del zoom donde destaca el '6 Pro' con un teleobjetivo que alcanza los 48 megapíxeles, siendo su tercera lente no compartida con ninguno de los otros dos modelos. En cualquier caso, y tal como resaltabamos anteriormente al hablar del chip Tensor, los tres dispositivos están capacitados para ofrecer un buen desempeño fotográfico gracias al tratamiento por software.

Notable alto en batería, pero con suspenso en carga rápida

Tener una buena autonomía en el smartphone es fundamental hoy en día y, al menos sobre el papel, esto es algo que garantizan cualquiera de estos tres dispositivos. En menor medida nos encontramos al Pixel 6a con sus 4.410 mAh, el más flojo a priori y al que mejora ya de forma sustancial los 4.600 mAh del Pixel 6. Más lejos debería llegar el Pixel 6 Pro con sus 5.000 mAh.

Ahora bien, si hablamos de carga rápida deberíamos pegar un tirón de orejas a Google. Y es que la compañía de la gran G no ha implementado cargas especialmente destacables para lo que encontramos en el mercado. Hasta 25 W para el Pixel 6a y 30 W para los Pixel 6 y 6 Pro. Si encima tenemos en cuenta que no incluyen el adaptador de corriente, el asunto empeora.

Qué modelo elegir según tus necesidades

En vistas de todo lo comentado, toca decantarnos por uno de estos tres móviles. Evidentemente, el móvil más completo y que podemos catalogar como "el mejor" es el Google Pixel 6 Pro. Ahora, ¿quiere decir esto que sea recomendable para todo el mundo? En absoluto.

Lo primero a tener en cuenta viene por el software, algo que comparten estos tres móviles en los que encontramos el Android más puro. No en vano, es la propia Google la que diseña este sistema operativo. Tener un Pixel te garantiza varios años de actualizaciones, siendo de los primeros móviles en recibirlas e incluso poder instalar betas como las de Android 13, siguiente actualización que llegará tras un año con Android 12.

Si tienes claro que es este el software que buscas, seguimos la búsqueda poniendo el foco en un factor clave: el tamaño. Encontrar un móvil Android compacto es complicado y el Pixel 6a se concentra entre los dispositivos más compactos del mercado, con un peso y tamaño de pantalla idóneo para tener plena portabilidad sin renunciar a la usabilidad. El Pixel 6 ofrece también un camino intermedio perfecto para quien no se sitúa ni entre los fans de los móviles grandes ni tampoco comulga con móviles pequeños.

Si eres de los que hace un uso intensivo del móvil para consumir contenido multimedia y/o jugar, el Pixel 6 Pro es buen compañero por sus 120 Hz de tasa de refresco y su alta resolución de imagen. Aunque debemos decir que los 90 Hz y la resolución FullHD+ del Pixel 6 no se quedan muy atrás y puede ofrecer una experiencia igual de grata.

Si tu prioridad es una buena cámara, ya advertimos que el Pixel 6 deja muy buen sabor de boca, pero no cabe duda de que el Pixel 6 Pro le gana en muchos detalles. Situado como uno de los móviles con mejor cámara de 2022, no deberías tener dudas a la hora de elegir si este terreno te es fundamental. Pro, Pro y Pro.

En otros términos debemos decir que son dispositivos muy semejantes. La diferencia en rendimiento no es muy alta pese a la diferencia de RAM, ya que el comportamiento del Google Tensor es fundamental. En batería si que hay diferencias interesantes sobre el papel, pero tampoco apuntan a ser determinantes. Por tanto, la cuestión económica puede ser al final determinante, teniendo que ser tú mismo quien calcule cuánto está dispuesto a gastar, ya que de inicio hay una diferencia bastante grande de 440 euros entre el modelo más básico y el más avanzado.

Ficha técnica de los Google Pixel 6a, 6 y 6 Pro