Seguimos con nuestro análisis a fondo del HTC Desire S. En la primera parte estuvimos hablando del acabado del teléfono y del hardware de este donde vimos que, sin contar con alardes, era un teléfono robusto, con un buen acabado pero bastante discreto.
En esta segunda parte hablaremos del software y del funcionamiento del teléfono así como de su comportamiento. En definitiva, de la experiencia del usuario y las impresiones que hemos sacado tras usar el terminal 15 días. Empecemos pues hablando del sistema operativo.
Sistema operativo, Gingerbread 2.3.3
HTC Desire S viene de fábrica con Android Gingerbread 2.3.3 por lo que disfrutaremos de las principales novedades que ofrece la última versión del sistema operativo como por ejemplo un sistema más cómodo para copiar y pegar, menos consumo de la batería, administración de descargas…
En líneas generales el funcionamiento del sistema es muy fluido y sólo ofrece pequeños tirones en momentos puntuales. Por lo tanto la experiencia básica de navegación por menús, abrir y cerrar aplicaciones es muy buena. Los 768 MB de RAM ayudan mucho a este propósito y nos permite volcar muchas apps en la memoria.
En lo que respecta a un uso más intenso con aplicaciones y juegos el teléfono responde perfectamente, para ser un teléfono de un procesador de 1Ghz y un Adreno 250. Aunque los resultados en Quadrant son bastante discretos a la hora de la verdad el HTC Desire S cumple muy bien su cometido en comparación con otros terminales similares como el Google Nexus One.
La conectividad del teléfono, tanto por Wi-Fi como por 3G, es excelente. Las páginas en el navegador cargan bastante rápido y las aplicaciones que utilizan esta conexión funcionan sin problemas. La conectividad a través de la tarifa de datos, al menos en Vodafone, siempre suele conectar a través de HDSPA si la cobertura es mínimamente buena.
HTC Sense, una capa bonita y fácil de usar
HTC Desire S viene con HTC Sense 2.1, una capa de software que modifica la apariencia de Android para darle un toque personal a la gama de teléfonos de la compañía. La interfaz es bastante atractiva y resultona. Además, como veremos a continuación, viene con unos cuantos ases en la manga.
Una de las principales bazas de HTC Sense es la facilidad que da al usuario para personalizar todos los aspectos del teléfono móvil. A saber: el fondo, los tonos de llamada y mensajes, agregar widgets al escritorio, etc. Esta cuestión es bastante interesante para los usuarios que se inicien en Android y no quieren complicarse la vida investigando.
Además de cambios en la interfaz HTC Desire S viene con unas cuantas aplicaciones instaladas por defecto. Algunas de ellas para sustituir a algunas aplicaciones básicas como la agenda a otras más completas como. Personalmente la única que me ha parecido ciertamente útil ha sido la que permite hacer tethering y compartir la conexión de datos a través de WiFi.
Más allá de las aplicaciones nos encontramos también con unos cuantos widgets propios de HTC Sense. Algunos de ellos bastante útiles como por ejemplo el calendario que se sincroniza con Google Calendar y los eventos de Facebook. También tenemos Friendstream para ver las últimas actualizaciones de Twitter, Facebook y Flickr.
Nada nuevo para quien ya conozca HTC Sense. En cambio, los usuarios que disfruten por primera vez de esta interfaz, o de un teléfono Android, se encontrarán con una experiencia muy amigable y que les permita configurar y utilizar el teléfono de forma muy sencilla e intuitiva.
Contenidos multimedia, música y vídeo
En lo que respecta a la reproducción de contenidos multimedia en la música no hemos encontrado ningún tipo de problema ni con la aplicación por defecto ni con Spotify. Las pruebas, en el reproductor por defecto, se han realizado con archivos .mp3 con una calidad de 192 kbps.
A la hora de reproducir vídeos los archivos en resolución PAL los reproduce sin mayor problema. Con archivos en alta definición sí que presenta algún que otro tirón. Los vídeos de YouTube los reproduce perfectamente. Con los archivos Flash en general puede bien pero con los que son especialmente pesados le cuesta un poco.
Además de poder reproducir vídeo en el propio terminal podemos compartirlo con otros dispositivos que estén conectados a la misma red a través de DLNA. En este apartado el HTC Desire S cumple con lo que se espera de un teléfono con estas prestaciones. Podemos ver pelis, compartir vídeo, escuchar música y reproducir archivos flash sin mayor problemas
Las cámaras del HTC Desire S
Hablemos ahora de las cámaras. Como mencionamos en la primera parte del análisis el HTC Desire S cuenta con una cámara trasera de 5 megapíxeles con flash LED y autofoco y una cámara frontal VGA. Hecho este breve repaso veamos qué tal funcionan.
A la hora de hacer fotografías la cámara trasera cumple las expectativas. En buenas condiciones de iluminación los colores y la nitidez es muy buena. En condiciones de poca luminosidad la cámara se defiende pero, como el resto de cámaras de teléfonos similares, la calidad deja un poco que desear.
Una de las principales bazas de la cámara trasera es la posibilidad de grabar vídeo en 720p con formato .3gp. En las pruebas que hemos efectuado la imagen y el sonido que graban son realmente buenas. La cadencia de fotogramas es estable y apenas se notan tirones si por ejemplo movemos la cámara.
La cámara frontal, a pesar de ser VGA, funciona muy bien tanto si hacemos fotografías como videoconferencias. En lo que respecta a esto último en las pruebas que hemos hecho, tanto por WiFi como 3G la calidad de la imagen es buena y apenas se han apreciado tirones.
La aplicación de la cámara que viene por defecto en el sistema nos permite seleccionar qué cámara queremos elegir y además podemos añadirle filtros. Desde los típicos de blanco y negro, color sepia a efectos más sofisticados que tanto están de moda ahora. A saber, efecto cámara lomo, colores saturados, etc.
Conclusiones de esta segunda parte
Y con esto acabamos la segunda parte del análisis del HTC Desire S. El software del teléfono es realmente muy completo y HTC ha hecho un gran trabajo en crear una experiencia de uso muy intuitiva para la gente que se introduce en Android. El rendimiento en los quince días que he estado probando el terminal ha sido muy bueno y ha cumplido con las expectativas que tenía sobre él. Cuando se ha usado de manera más intensa también ha rendido bien aunque el teléfono se calienta bastante.
Para concluir con el análisis del HTC Desire S nos queda la tercera parte donde compararemos el teléfono con el HTC Desire y sacaremos unas conclusiones generales pero de momento, como habéis podido leer, estamos muy satisfechos con el terminal.
En Xataka Android | Análisis a fondo, HTC Desire S (I).