Algo pasa con Gearbest. Desde hace unos días, la popular tienda de móviles y gadgets china no da señales de vida, con una web que no funciona y sin atender a ninguna de sus redes sociales. Por si eso fuera poco, sobrevuelan los rumores de bancarrota de su empresa matriz.
Ante este silencio absoluto desde hace ya más de una semana, las probabilidades de que se trate simplemente de una mala configuración del servidor se reducen. La explicación más plausible es que Gearbest haya cerrado sus puertas sin previo aviso, dejando así en el limbo a todos los usuarios con productos en garantía o pedidos pendientes.
Gearbest desaparece sin rastro
La web oficial de Gearbest lleva rota desde hace semanas, arrojando un mensaje de error para todo el mundo, en todas las regiones. No sería la primera vez que un error tumba una página importante, pero el hecho de que los errores se prolonguen durante tanto tiempo ha hecho que se empiece a esperar lo peor: que la compañía ha cerrado por las malas, sin previo aviso ni ningún plan de contingencia para los procesos pendientes en cuanto a pedidos, reembolsos y garantías pendientes.
Por si esto fuera poco, la compañía no dado señales de vida en ninguna red social desde julio, cuando se data su última publicación en su perfil de Facebook. Un poco más tarde la compañía dejó de responder a comentarios en reseñas en Google Play. La respuesta más reciente es del 18 de agosto. Después, silencio.
Con cada día que pasa, se reducen las probabilidades de que se trate de un error puntual en la web, más aún sin un simple aviso en alguna de sus redes sociales. Otros sistemas siguen operativos, como el bot de Facebook Messenger. Siendo una tienda global con tanta popularidad, es inconcebible que un error de tanto calibre se prolongue durante tanto tiempo sin un simple aviso.
Para añadir más confusión al asunto, la aplicación oficial sí parece funcionar al menos en su funcionalidad básica: navegar por el catálogo de productos. Las partes de la aplicación que en realidad muestran información de directa desde la página web arrojan el mismo error.
Por desgracia, el hecho de que la aplicación siga funcionando supone un problema todavía mayor. Algunos usuarios denuncian en las reseñas de Google Play que se pueden seguir haciendo pedidos, pero no cancelar o pedir reembolsos.
Con la web en KO técnico, la aplicación sigue siendo el último resquicio para consultar los pedidos pendientes, pues es todavía posible iniciar sesión y ver la información de pedidos. Esto puede ser útil de cara a intentar pedir indemnizaciones o reembolsos más adelante, algo que, por otra parte, no será nada fácil cuando la empresa parece haberse desvanecido por completo.
Los clientes, en el limbo
De este modo, todos los clientes con cuentas pendientes con Gearbest se quedan en el limbo, sin ningún lugar al que reclamar. Esto incluye a quienes tienen pedidos pendientes de recibir, quienes los recibieron antes de que la web dejara de funcionar y ahora no pueden cancelarlos o devolverlos, además de todo aquel con algún producto que seguía cubierto por la garantía de Gearbest.
En Gearbest, todos los procesos de garantía y reembolso se procesan mediante tickets de soporte, basados en su página web y que, por tanto, son imposible de abrir o consultar hoy en día. Con los tickets fuera de juego y las redes sociales desatendidas, simplemente no hay ningún modo de contactar con la compañía. No parece haber nadie al otro lado de la línea. Tampoco contesta nadie al número de teléfono listado en su página de Facebook: una grabación te indica que lo intentes de nuevo más tarde.
Mientras que se aclara el asunto -si es que llega a aclararse- quienes necesiten usar la garantía de un producto vendido en Gearbest se verán obligados a probar suerte con el soporte oficial de la marca, en caso de que el producto esté cubierto por garantía mundial, que no es lo habitual. Desgraciadamente, poco más se puede hacer pues Gearbest procesaba estas peticiones manualmente y, ahora, no parece haber nadie al mando.