Llevamos unas semanas desglosando lo que nos ha parecido lo mejor de 2016 a los editores de Xataka Android, desde aplicaciones de productividad hasta los mejores móviles chinos, pasando por la categoría de juegos que siempre trae polémica. Pero este año queríamos hacer un resumen más completo aún.
Después de mucho debatir intermanente hemos elegido que ha sido, en general, lo mejor y lo peor de Android en 2016. Y es que cada año hay claros y sombras en cualquier tema que se toque (ya hemos visto que los resumenes políticos van a tener más "lo peor" que "lo mejor") y Android no es una excepción. Veamos lo que nos ha deparado el 2016.
Lo mejor de Android en 2016
Google Pixel
Este año hemos visto un cambio muy relevante en cómo Google afronta su terminal bandera. El cambio que más salta a la vista es, cómo no, el nombre. Ya no estamos ante los Nexus, terminales pensados para desarrolladores, sino ante un móvil enfocado a las masas. Y además, un terminal puntero en todos los aspectos, desde el procesador a la cámara. Lejos quedan aquellos años de gamas medias a precios ajustados.
Aunque haya tenido críticas, sobre todo por el precio y el cambio de nombre, Google en 2016 ha lanzado un terminal puntero, cuidado y con una buena campaña. De hecho las ventas están siendo muy buenas comparadas con lo que se vendían los Nexus, y eso que todavía no ha llegado a muchos países.
En definitiva, con el Google Pixel la compañía de Mountain View se ha tomado en serio el hardware y es una muy buena noticia. Esto significa que Android no depende únicamente de lo bien que lo hagan los fabricantes, sino que también está ahí Google para crear terminales cuidados y que casen perfectamente con el software. Es, desde luego, una buena noticia para nuestro sistema operativo favorito.
Android Nougat
La otra buena noticia del año han sido las novedades presentadas por Android Nougat. Es cierto que no ha sido una revolución, pero sí una evolución en el camino adecuado. Y además hemos tenido al poco tiempo una revisión con la versión 7.1 que mejoraba más aspectos.
Hay muchas novedades, pero hemos recopilado las más interesantes para nosotros:
- Optimizaciones del sistema y aplicaciones más ligeras: Ahora actualizar no cuesta tanto, el sistema va más fluido y por ejemplo actualizar el sistema es mucho más cómodo y rápido, no hay esperas infinitas al reiniciar
- Productividad mejorada: Pantalla dividida (que anticipa un modo tablet convertible muy potente cuando se integre con Chrome OS), accesos directos en el escritorio, cambio rápido entre aplicaciones, notificaciones mejoradas... todo esto es un gran avance en Android.
- Google Assistant: aunque estamos ante una funcionalidad que de momento está solo en los Google Pixel y en inglés, apunta en la buena dirección. En no tanto tiempo lo veremos en más terminales y si lo siguen mejorando quizá estemos ante el primer asistente funcional que puede cambiar, de una forma definitiva, la forma de relacionarnos con las máquinas.
- Almacenamiento inteligente: Todos nos hemos quejado alguna vez de los problemas de almacenamiento de los terminales. Y Google ha tenido una gran idea en la versión 7.1: si tienes un backup en la nube, las fotos se van borrando solas (con un retraso de 30, 60 o 90 días). Desde luego un gran avance.
- Vulkan API : La nueva API gráfica de Android es un paso adelante en el sistema operativo como plataforma de videojuegos. Cada vez se postula más como una plataforma alternativa a las grandes consolas y este era un paso necesario para la evolución del sistema.
Lo peor de Android en 2016
Samsung Galaxy Note 7
Creo que cualquiera al que se le pregunte sobre qué ha sido lo peor de Android en 2016 lo tendría claro. No hay más que subirse a un avión para ver que el tema de los Samsung Galaxy Note 7 explosivos han traspasado los círculos tecnológicos para llegar al gran público de una forma masiva. Y esto es malo para Android. Se olvidará, siempre se olvidan estas cosas, pero el golpe ha sido duro para el mayor fabricante de Android y por tanto afecta al sistema operativo.
El fallo de los Note explosivos no ha tenido que ver con Android, y parece que ni con las baterías. Parece más un problema de diseño muy agresivo para meter más componentes y más batería en menos espacio. Es un tema complicado que va a pasar factura a Samsung este año y seguro que las cuentas se resentirán también en futuros trimestres. Lo bueno (siempre hay que sacar lecturas positivas de todo) es que muchos ingenieros podrán aprender con un caso práctico cuáles son los límites del diseño de un dispositivo móvil.
La fragmentación de Android
Android, por su filosofía, nació fragmentado. Por un lado está el que desarrolla el sistema operativo, Google, y por otro los fabricantes. Por tanto el control del mismo es muy complicado y tenemos terminales en el mercado con múltiples versiones del mismo. Esto es, desde luego, un problema, al menos en dos aspectos: por un lado la seguridad, ya que muchos fabricantes no sacan parches para sus terminales; y por otro el desarrollo de aplicaciones, sigue siendo complicado que todo funcione bien en todos los terminales.
Google ha ido intentando poner parches. Por un lado muchas aplicaciones las ha sacado del sistema operativo y las ha pasado a Google Play. Por otro lanzó un programa llamado Android One para que fuera Google quien se encargara de estas actualizaciones. Pero ni por esas ha logrado cerrar esta fragmentación. De hecho, el despliegue de Android Nougat tiene pinta de ser el más lento de la historia.
Hay rumores de que Google podría estar intentando frenar esta fragmentación a través de actualizaciones de Google Play pero la cosa es complicada. Veremos si logran ingeniar alguna solución para que al menos la parte de la seguridad se actualice de esta forma.
De todas formas lograr un sistema completamente homogéneo tiene también sus pegas, como se ha visto con los relojes Android Wear: solo se diferencian en el diseño y los fabricantes han dejado de sacar nuevos (no es el único motivo de que no triunfen pero sí uno de ellos). Así que soluciones fáciles no hay.
