Google responde a ChatGPT de OpenAI con Bard, su nueva IA conversacional

El pasado mes de diciembre Google activó el "código rojo" ante el lanzamiento de ChatGPT, la popular inteligencia artificial conversacional que se ha convertido el último fenómeno masivo que más rápido ha crecido en la historia de Internet y que amenaza al buscador de Google.

Dos meses más tarde, Google ha presentado Bard, un nueva IA conversacional con la que la compañía del buscador más usado en el mundo quiere plantar cara a ChatGPT de OpenAI.

Bard será el ChatGPT de Google

Hasta la llegada de ChatGPT, Google había sido un referente en Inteligencia Artificial. La compañía presentó hace dos años su IA conversacional llamada LaMDA (Language Model for Dialogue Applications) pero OpenAI se adelantó con su propia alternativa.

El éxito de ChatGPT ha acelerado el próximo paso y el más importante que va a dar Google hacia la inteligencia artificial. Próximamente la empresa lanzará Bard, su nueva IA experimental de conversación basada en LaMDA.

Para no dañar la reputación de Google, Bard estará disponible inicialmente para un grupo de testers de confianza, que se encargarán de probarla antes de ponerla a disposición del público en las próximas semanas.

Bard es una Inteligencia Artificial como ChatGPT y que la compañía integrará en el Buscador de Google, lo que nos permitirá hacer recibir una respuesta directa a preguntas más completas. Bard toma información de internet y la empleará para ofrecer respuestas actuales y de alta calidad. Por ejemplo, los usuarios podrán preguntar a Google qué es más fácil, si aprender a tocar el piano o la guitarra para tener una respuesta directa y justificada, o pedirle a Google que le explique a un niño de 9 años los últimos descubrimientos del telescopio espacial James Webb.

Inicialmente Google lanzará Bard con el modelo LaMDA reducido. Este modelo es mucho más pequeño, pero tiene tiene la ventaja de que requiere una potencia de cálculo mucho menor, con lo que podrá llegar a más usuarios. Con los comentarios externos y las propias pruebas internas de Google ajustarán las respuestas de Bard para que sean de calidad, seguras y basadas en el mundo real, para que no haya respuestas inventadas.

Vía | Google