Muchas veces decimos que un juego es simple, sencillo, fácil y demás sinónimos que intentan definicir la simplicidad y facilidad de juego que actualmente se debe tener para triunfar en el mundo de los videojuegos para dispositivos móviles que tanto mercado están absorbiendo a costa de consolas de sobremesa y portátiles. Sin embargo, cuando hablamos de que Pixel Towers es simple queremos decir una sencillez comparable al mecanismo de un chupete.
Como bien decimos, es simple, pero ante todo es rápido frenético. Tendremos que contruir una torre lo más alta y ancha posible con un método de juego que nos recordará a las recreativas de salones arcade en las que teníamos que apilar unos bloques para intentar conseguir unos premios grandes pero obviamente con una máquina trucada. Esta vez no gastaremos monedas y tenemos algo que mucha gente agradece: los powerups.
Tendremos que construir una torre empezando con una base de cuatro bloques y si no conseguimos encajar los bloques con la base se irá haciendo más estrecha y difícil y cuando todos los bloqueas caigan fuera es fin del juego. Por suerte tendremos mejoras como la ampliación de la base, varios pisos de golpe y la ralentización de la grúa, pemitiendo un juego frenético y sencillo con rankings mundiales.