Esta semana se va a iniciar la carrera de los smartwatch. Samsung lanza su Samsung Galaxy Gear y aunque no es el primero, sí que va a ser un impulso definitivo a esta tecnología, pues es el fabricante de móviles más grande el mundo y, de momento, todo lo que toca se convierte en oro. Más tarde llegarán otros fabricantes, siendo Apple el más esperado. ¿Será una nueva revolución? ¿Un fracaso? ¿Un éxito?
En mi opinión, pueden ser un bastante inútiles y aún así un éxito de ventas. Después de lo visto en móviles y en tablets, parece que a todo lo que se aproxima Apple se vuelve distinto e imprescindible y es un secreto a voces que el iWatch acabará saliendo. Pero también tenemos casos de fracaso (o éxitos menores) como la Apple TV. Aunque todo está por ver en dicho sector.
¿Por qué creo que serán inútiles?
Lo primero, creo que los Smartwatch serán bastante inútiles. No digo que no se puedan hacer muchas cosas con ellos, pero una pantalla tan pequeña es muy incómoda. De hecho una tendencia que hemos visto es que según los móviles se volvían más imprescindibles han crecido de tamaño. Cuanto más usas algo más grande quieres que sea (siempre que no sea incómodo).
Por tanto aunque sirva para ver las redes sociales y sacar fotos no creo que mucha gente lo haga. Es mucho más incómodo que sacar el móvil. De hecho en comodidad versus portabilidad tenemos el camino plagado de dispositivos: móvil, tablet, portátil. Cuanto más grande más cómodo es de usar, aunque es cierto que pierde atractivo por la menor movilidad. Pero el smartwatch, a pesar de ser muy portátil y visible es muy incómodo para trabajar en él.
Yo creo que el principal uso de un Smatwatch, aparte de dar la hora y la alarma, vienen a ser las notificaciones. Tener las notificaciones de Android en la muñeca, y que nos vibre o avise cuando tengamos un correo, una mención en twitter o un Whatsapp en el móvil. Una pequeña información siempre visible para evitar tener que sacar el móvil del bolsillo.
El problema es que tener dicha posibilidad no es una revolución, es una pequeña ayuda para no estar sacando todo el rato el móvil del bolsillo, pero perfectamente prescindible. Cosa que no sucede, por ejemplo, con el smartphone. El smartwatch va a ser bastante inútil.
¿Por qué pienso que va a ser un éxito?
Aquí parece que me estoy contradiciendo. Si es inútil, ¿por qué un éxito? Porque los relojes, en una gran mayoría, son caros. Basta echar un vistazo en una tienda de relojes para ver que si nos salimos un poco de los modelos más sencillos estamos por encima de los 100 euros. Y aquí estamos hablando de relojes con muchas más funcionalidades (aunque como digo, inútiles en mi opinión) por precios que irán de 150 a 200 euros. Son precios equivalentes a los relojes que se suelen vender.
Por tanto creo que mucha gente apostará por un smartwatch. Y que, aunque vea que apenas lo usa, si tiene que renovarlo seguramente se incline otra vez por uno, ya que las alternativas son de precio muy similar. El éxito vendrá por el precio, no por sus posibilidades.
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