Si haces fitness o vas al gimnasio, Progression es la aplicación que necesitas

He probado bastantes aplicaciones para llevar un registro de la actividad en el gimnasio y no olvidarme de los detalles de cada ejercicio. Al final ninguna me convence y acabo usando Google Keep o Evernote para apuntarme todo. Estos días he estado probando Progression y es una de las opciones que más me ha gustado.

Progression es una aplicación para seguir nuestros entrenamientos de fitness donde podemos configurar diferentes sesiones, el tipo de actividad y cómo la realizamos (peso y repeticiones). Todo muy bien ordenado y con el aliciente de estar diseñada según los estándares de Material Design.

Ponte en forma con orden (y Material Design)

Cuando abrimos Progression por primera vez nos encontraremos con una hoja de entrenamiento predefinida. Podemos empezar con ellas y crear una nueva definiendo los días que entrenamos y los ejercicios de cada sesión. Todo muy sencillo e intuitivo tanto a la hora de configurarlo como para navegar por los diferentes menús.

A la hora de añadir ejercicios disponemos de una base muy completa para que solo tengamos que hacer una búsqueda rápida y no añadirlos manualmente. De hecho, si tenemos duda con alguno viene con una pequeña descripción para indicarnos cómo hacerlo.

Hecho esto, Progression comienza a funcionar como una lista de tareas donde vamos marcando cada ejercicio realizado. De este modo luego podemos ver nuestros progresos y ver qué tal hemos ido a lo largo de la semana. De hecho, podemos sincronizar nuestros resultados por Dropbox.

La aplicación está muy bien pero a día de hoy tiene un problema: no está traducida por completo al español. Hay ciertos menús y mensajes de ayuda en la lengua de Cervantes pero el resto lo encontraremos en inglés y en algunos momentos llega a ser engorroso ya que, si entrenas, probablemente conozcas los ejercicios por su nombre en español y a la hora de buscarlos tengas que hacer un poco más de esfuerzo.

Esperemos que en las próximas actualizaciones lo añadan porque la aplicación bien merece nuestra atención si vamos al gimnasio habitualmente. Podemos probarla de forma gratuita o pagar la versión Pro que añade opciones de sincronización por tres euros.