Google Maps está muy bien pero hay una cosa en la que Petal Maps le da mil vueltas

Google Maps es una de las aplicaciones de mapas y navegación más populares, especialmente en Android, donde viene preinstalada. Del embargo de Huawei nació Petal Maps, que en casi cuatro años ha crecido para lograr plantarle cara a Google Maps. Es más, en algunas cosas me parece hasta mejor.

Los mapas de Google llevan ya casi 20 años con nosotros y la aplicación ha recibido obviamente varios lavados de cara y una tonelada de novedades. Sin embargo, Google Maps sigue teniendo margen de mejora y eso es algo que resulta más evidente si probamos una alternativa como Petal Maps de Huawei.

La diferencia está en los detalles

Google Maps es, probablemente, la mejor aplicación de mapas, aunque si hablamos de la mejor aplicación de navegación GPS, no está tan claro. Mientras que Google Maps tiene una base de datos descomunal de puntos de interés y casi 20 años de experiencia mejorando sus mapas, otras aplicaciones se especializan en la navegación, como es el caso de Waze, también de Google.

Con el tiempo nos hemos acostumbrado a cómo son las cosas en la navegación de Google Maps, y lo cierto es que no es necesariamente la mejor ni la más clara. Esto es algo que ya sale a relucir al usar una aplicación como Waze, aunque para mi la mayor evidencia apareció al seguir una ruta en Petal Maps.

Con los años nos hemos acostumbrado a la línea de Google Maps que muestra nuestra trayectoria y que poco ha cambiado más allá cambiar de colores hace relativamente poco e incorporar la información del tráfico en cada segmento de la ruta: la ruta ocupa toda la carretera.

Esto es suficiente en muchos casos o en carreteras sencillas, pero si circulamos por una autopista con muchos carriles que entran y se van, bifurcaciones, puentes y túneles a la vez, puede ser una pesadilla entender por dónde quiere que vayamos. ¿Me quedo en este carril? ¿Salgo? Tampoco ayuda que el zoom predeterminado de Google Maps está algo alejado y los movimientos a veces no son muy fluidos. A continuación tienes un ejemplo.

De interpretar la línea omnipresente de Google Maps (ayudada con las indicaciones y las flechas de la próxima maniobra en el panel verde superior, que no siempre es demasiado explicativo), pasamos a Petal Maps, que es mucho más visual. Y no me refiero solo a que con el ángulo apropiado vamos a ver el cielo en el horizonte reflejando las condiciones del tiempo del momento (lluvia, sol, etc), sino a que te muestra mucho mejor por dónde tienes que ir.

Las ventajas de Petal Maps aquí son dos. Por un lado, la línea de la ruta no ocupa toda la carretera, sino que convenientemente abarca los carriles por lo que puedes ir y va mutando para mostrarte en cuál colocarte para salir de la autopista. Es, en mi opinión, mucho más fácil de entender que interprestando las flechas de la parte superior que, a veces, cambian demasiado rápido si hay muchas indicaciones seguidas.

Y no sólo es la línea de la ruta. Mientras que en Google Maps ver nuestro progreso en una ruta es como quien ve pintura secarse en una pared, en Petal Maps el movimiento es mucho más suave y animado, con un zoom predeterminado que nos deja ver mejor por dónde vamos (y en qué carril estamos).

Como puedes ver en el vídeo superior, es una experiencia bastante más agradable y no necesariamente significa que nos vaya a distraer más. Al contrario, en mi opinión, si puedes ver fácilmente los carriles y la ruta con mayor detalle (de más cerca), te evita tener que mirar al mapa con atención y leer e interpretarlo.

Estas indicaciones más precisas necesitan que el GPS sea extremadamente preciso, algo que no siempre es así. En carreteras complicadas donde se juntan muchos carriles, vias de servicio, puentes y túneles, puede darse el caso que el GPS nos esté colocando donde no es y volviéndose absolutamente loco con las indicaciones. Aquí hay otro detalle de Petal Maps que me llama mucho la atención: pasar al puente o a debajo del puente.

Este botón, que aparece cuando Petal Maps tiene dudas sobre dónde estás, te permite ajustar la ubicación del GPS para que te coloque correctamente encima o debajo del puente, algo que puede cambiar radicalmente la ruta y confundirte mucho. De nuevo, es algo que en Google Maps sería difícil de distinguir pues de lejos todas las carreteras son líneas y si no conoces la zona puedes terminar con una confusión muy seria (y peligrosa) si el navegador te está dando indicaciones basadas en la ruta por una carretera en la que en verdad no estás.

Es en estos pequeños detalles en los que se nota la mano de TomTom en Petal Maps, con una experiencia de navegación más cercana a los GPS de toda la vida y no tanto a un antiséptico Google Maps que, en mi opinión, todavía tiene una cosa o dos que aprender de Petal Maps.

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