Does not commute es el juego para la gente que piensa que todo el mundo conduce fatal

Si conducimos, seguro que más de una vez hemos maldecido las habilidades de los conductores que nos rodean en la carretera. Es más, seguro que incluso habréis insinuado que conducís mejor que ellos. Es cierto que hay gente ahí fuera que conduce muy mal y a veces es frustrante. ¿Te gusta esa sensación? Seguro que no pero te encantará sentirlo en el juego que os presentamos hoy: Does not Commute.

La propuesta de este juego realizado por Mediocre Games es muy sencilla: llevar un coche de un punto a otro del mapa con unos controles que resultaba imposible hacerlos más sencillos. Hasta aquí todo bien pero la situación se complica porque cada vez que iniciamos un nuevo trayecto, nos tocará competir contra nosotros mismos. Ahora nos toca demostrar si somos tan buenos conduciendo.

De domingueros y controles frustrantes

Empezamos la partida y el juego nos pide que vayamos de un punto A a un punto B. Podemos elegir la ruta que queramos pero lo ideal es hacerlo por la más rápida ya que el tiempo corre en nuestra contra. La realizamos con éxito y entonces es el momento de realizar un nuevo trayecto. ¿Recuerda el que acabas de hacer? Pues en el siguiente que hagas estará el que has hecho anteriormente y así hasta ver cómo un montón de coches que hemos conducido previamente se cruzan y hacen que cada viaje que hagamos sea más complicado que el anterior.

La idea de ir añadiendo cada viaje que hagamos está muy bien elaborada ya que nos permite ir escalando la dificultad de cada partida y también cuidar lo máximo posible nuestra habilidad para no entorpecernos a nosotros mismos en las que vayamos realizando. Cada cierto número de paseos iremos cambiando de mapa, cada vez más grande y complicado pero igual de divertido.

El tiempo es limitado en cada partida pero podremos ir consiguiendo en determinadas rondas tiempo adicional para así poder ir completándolas del tirón. Si en alguna la liamos y nos chocamos, siempre podemos rebobinar y perder un segundo pero corregir la dirección para no equivocarnos.

Los controles son muy sencillos y tan solo tenemos dos botones para girar a la izquierda o la derecha. Los coches aceleran solos y habrá cambios en el clima en tiempo real que se encargarán de hacer la conducción más accidentada y complicada. Visualmente el juego está cuidado con mucho mimo y aunque no es el que más luzca en Android, se ve realmente bien.

Does not Commute es un juego gratuito pero si queremos ir guardando nuestro progreso cada vez que superamos un mapa, nos tocará pagar, El precio es de 2,12 euros y teniendo en cuenta que lo podemos probar gratis vosotros seréis quienes decidáis si os merece la pena o no. A mí personalmente me ha enamorado y tras superar la fase del barrio residencial he pagado. Buen trabajo para un estudio de desarrollo cuyo nombre no refleja la calidad de su creación.