Aplicaciones con las que flipaste en su día: Pushbullet

Desde los inicios, los móviles Android y el PC no se han llevado muy bien entre sí. Google nunca ha tenido un gran interés por el software de Escritorio de modo que en Android no existe "un iTunes" para Windows que haga de puente de forma oficial, para bien o para mal.

Algunos fabricantes como Samsung crearon sus propias aplicaciones para llenar el hueco, si bien una de las alternativas más populares fue Pushbullet, creada en 2013 y la cual recordamos hoy en nuestro peculiar baúl de los recuerdos.

¿Qué tenía de especial?

Pushbullet era -y es- una aplicación que permitía que varios dispositivos se intercomunicaran entre ellos. Disponible para Android, iOS, Windows y otros sistemas mediante creaciones de la comunidad (incluyendo Mac y Linux) la idea principal es ver lo que pasa en el móvil en el PC. También en sentido inverso: poder enviar cosas y responder mensajes en el móvil, desde el PC.

La primera vez que nos hicimos eco de Pushbullet aquí en Xataka Android fue en 2014, y por aquel entonces permitía enviar notas, enlaces, direcciones, listas, imágenes y archivos desde el PC al móvil y vice versa, así como mostrar las notificaciones que llegan al móvil en Windows.

Con el tiempo se fueron añadiendo nuevas funciones como la sincronización del portapapeles, la compatibilidad con SMS, WhatsApp, LINE, Facebook hasta mutar al diseño a lo app de mensajería que mantiene hoy en día.

Su aspecto ha cambiado con el tiempo -no mucho, eso sí- pero la esencia se ha mantenido igual: facilitar el envío de cosas del móvil al PC y del PC al móvil, así como entre distintos móviles o dispositivos. Algo así como un sistema de mensajería para hablar contigo mismo.

¿Qué ha sido de Pushbullet?

Habrá quien haya visto el titular de este artículo y se haya llevado las manos a la cabeza. "¿Pushbullet? ¿En su día? ¡Pero si lo sigo usando a diario!". Sí, Pushbullet sigue existiendo y funcionando hoy, si bien es evidente que la aplicación ha perdido mucho fuelle desde su lanzamiento hace ya seis años.

El punto de inflexión sucedió en noviembre de 2015, cuando la compañía cambiaba su modo de negocio al modelo premium de suscripción, que de la noche a la mañana convertía de pago a varias de las funciones que hasta ese momento eran gratis. El coste de la suscripción era entonces de 5 dólares mensuales o 40 anuales.

El cambio mantenía el envío de enlaces en ambas versiones, pero la versión gratuita limitaba al envío de 100 mensajes al mes e impedía responder a notificaciones desde el PC: unos cambios que no gustaron mucho a los usuarios.

Esto es claramente visible en el gráfico de búsquedas de Google Trends, donde hay una bajada pronunciada a finales de 2015 coincidiendo con este nuevo sistema de suscripción. Desde entonces la aplicación se mantiene en niveles estables, pero con mucho menos interés que antaño.

Los usuarios no solo tuvieron que buscar alternativas, sino que poco a poco las aplicaciones de mensajería poco a poco le han ido comiendo el terreno con la función de hablar contigo mismo y los clientes para PC como es el caso de Telegram o WhatsApp en menor medida. No solo son alternativas gratis, sino son apps que generalmente ya tienes instaladas.

En la actualidad Pushbullet poco ha cambiado en los últimos cinco años. Durante todo 2017 se actualizó solo seis veces y en todo 2018 solo recibió tres actualizaciones, todas ellas a finales de mes. Parece que durante 2019 está cogiendo algo de tracción (ya va por once actualizaciones), aunque los planes de precios permanecen inmutables desde hace cinco años.

¿Sigue teniendo sentido hoy en día?

Pushbullet nacía en 2013 con la idea de ayuda de facilitar el uso de varios dispositivos, y el problema sigue exactamente igual hoy en día, de modo que la premisa sigue siendo tan válida hoy como hace un lustro.

Son varias las iniciativas que intentan hacer este puente entre PC y móvil, como por ejemplo Your Phone de Microsoft o el eterno rival de Pushbullet AirDroid. Mientras siga sin haber una aplicación oficial de Android para Windows, las aplicaciones de terceros para sincronizar datos seguirán estando a la orden del día.

Ahora bien, como comentábamos antes, las aplicaciones de mensajería poco a poco han ido llenando el hueco gracias a su versión para escritorio y los chats contigo mismo. Esto es especialmente relevante en Telegram, que cuenta con un apartado especial Mensajes guardados y almacena todo lo que le envíes en la nube, además de permitirte enviar prácticamente cualquier cosa.

Pushbullet sigue teniendo sentido hoy en día, o al menos su idea principal. Su sistema de precios bajo suscripción mensual no tiene mucho sentido hoy en día teniendo en cuenta las alternativas gratuitas, aunque ese es otro tema.