Con una cifra estimada de 3,3 millones de aplicaciones disponibles en Google Play, hay quien podría argumentar que "ya está todo inventado", pero no siempre ha sido así. Hace un lustro el panorama era distinto, y como consecuencia muchas aplicaciones se hicieron tremendamente populares. En este artículo recordaremos una de ellas: ZombieBooth.
ZombieBooth era y es una aplicación con la cual te podías convertir en un zombie. Esto hoy en día puede parecer algo demasiado trivial, pero en su momento destacaba por su convincente resultado, la facilidad para aplicarse a la cara y los efectos 3D. ¿Qué fue de él?
¿Qué tenía de especial?
ZombieBooth es una aplicación muy veterana en Google Play. De hecho, estrenó su andadura en la tienda de Google cuando se llamaba Android Market. La primera versión era compatible con Android 1.6, la versión de hace prácticamente una década.
Eran otros tiempos, con teléfonos como el HTC Magic o Motorola Milestone. Estamos hablando de terminales con procesadores de un núcleo a 600 Mhz, 256 MB de RAM y cámaras de como mucho 5 megapíxeles. No obstante, es posible que conocieras la aplicación unos años más tarde, durante el boom de las apps para "cambiar tu cara". Lo mismo podías convertirte en un zombie que en calvo que en vampiro.
En 2012 los smartphones Android tenían algo más de potencia (yo personalmente tenía por aquel entonces un Xperia Mini Pro, con nada menos que 512 MB de RAM y cámara frontal VGA), pero seguían yendo bastante cortos como para poder hacer algo realmente impresionante en tiempo real. Este tipo de aplicaciones, ZombieBooth incluido, era lo más a lo que se podía aspirar: edición medio automática - medio manual, con un resultado suficientemente aparente para resultar gracioso.
Vale, tu teléfono era inteligente: podías llamar, chatear y jugar a varios juegos, pero había pocas oportunidades de simplemente hacer el tonto con él. Ahí encajaron este tipo de aplicaciones, con resultados graciosos que no podías evitar enseñar a tus amigos. The Walking Dead empezó a emitirse en 2010, por cierto, catapultando el fenómeno zombi a lo más alto.
ZombieBooth hacía fácil aplicar ese tipo de efectos con un aceptable sistema de reconocimiento facial para la fecha. Detectaba automáticamente los ojos y boca, por lo que no debías casi tener que ajustar nada. Además, completaba la oferta con un efecto "WOW" causado por el uso de animaciones en pseudo3D y sonidos.
Tocando en la pantalla podías afectar la animación resultante, con mordiscos por doquier acompañados de los respectivos gemidos zombi. Era posible guardar todo esto como vídeo y compartirlo con tus amigos.
¿Qué ha sido de ZombieBooth?
Volvamos al presente. ¿Qué ha pasado con la otrora popular aplicación para transformarte en un zombi? Pues sigue estando disponible en Google Play, y se sigue actualizando de cuando en cuando. La última actualización es de febrero de 2017, aunque no se puede decir que haya cambiado mucho desde 2012.
ZombieBooth está atrapado en la franja de los 10 millones de descargas desde 2012 y más o menos la aplicación permanece también congelada. Funcionar, funciona, aunque tiene algunos problemas visuales en la previsualización de la cámara y funciona igual que antaño: debes ajustar dónde están los ojos y la boca.
De los pocos cambios que ha sufrido la aplicación en este tiempo, no podemos evitar pensar en qué estaban pensando los desarrolladores al ofrecer la opción de "conseguir virus". Si quieres virus gratis, debes realizar tareas. No sé tú, pero yo no quiero virus, gracias. Nota: los virus se usan cada vez que usas el efecto: tienes tres nada más empezar.
No solo de virus vive el ZombieBooth, y también deberás coleccionar monedas para personalizar tu zombie resultante. La premisa es la misma: puedes personalizar tu zombie con distintos elementos: unos gratis y otros no. Si te quedas sin dinero, deberás realizar tareas... o rascarte el bolsillo.
¿Sigue teniendo sentido hoy en día?
ZombieBooth tenía buena tecnología para su época, pero estar básicamente abandonado durante un lustro no le ha ayudado a mantenerse relevante. Hoy en día, lo que consigue ZombieBooth ajustando semimanualmente en una foto se puede hacer mejor, en tiempo real, y en vídeo.
Lo hemos visto en Snapchat, Instagram, Facebook y muchas más aplicaciones que le seguirán. No tiene mucho sentido una aplicación para añadir un único efecto cuando otras tienen decenas de efectos distintos, y mejores. Si hace cinco años ya era "raro" instalar una aplicación solo para convertirte en zombi, hoy en día lo es aun más: mucho tienes que estar interesado en esas criaturas para que le dediques tanto protagonismo.
Por cierto, que si estás obsesionado por los zombis, tienes algunas opciones más actualizadas como la aplicación aprobada por The Walking Dead: The Walking Dead Dead Yourself. Es básicamente lo mismo, pero con más variedad de elementos para personalizar y sin virus ni monedas, que es de agradecer.
Si algo podemos aprender de todo esto es que lo que nos parecía avanzado hace unos años está completamente obsoleto hoy en día. ¿Nos parecerán increíblemente absurdos en cinco años los efectos de Snapchat y Animojis? Probablemente.
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