Seguramente hayas oído hablar alguna vez del portapapeles. Se trata de un sistema para copiar y pegar información (en el caso de Android suele ser texto) entre aplicaciones, lo que, en otras palabras, se traduce en la herramienta que sirve para copiar y pegar (entre otras cosas). Hay varias aplicaciones con las que sacarle provecho, pero las más conocidas con los gestores de portapapeles, unas apps que registran todo lo copias y lo guardan para que puedas acceder fácilmente en otro momento. O así era hasta Android Q.
La primera beta de Android Q ya está entre nosotros y viene cargadita de cambios, no tanto estéticos sino a nivel de funciones y desarrollo. Uno de los últimos tiene que ver con la privacidad y el acceso a los datos, y es que Google ha decidido cortar de raíz el acceso al portapapeles en segundo plano, es decir, dejar de dar soporte a los gestores de portapapeles.
Solo teclados por defecto y apps en pantalla
El cambio ha sido descubierto en el apartado "Cambios en los datos e identificadores" y reza lo siguiente: "A menos que tu aplicación sea el editor de métodos de entrada predeterminado (IME) [el teclado] o la aplicación que actualmente se está usando, tu aplicación no puede acceder a los datos del portapapeles". En otras palabras, el acceso al portapapeles en segundo plano pasa a ser cosa del pasado.
Hasta Android 9 Pie, el acceso al portapapeles estaba abierto a cualquier aplicación, y si bien es una función necesaria para que los gestores de portapapeles funcionen, abre las puertas a que cualquier desarrollador con malas intenciones acceda a información que no le compete. Un ejemplo sencillo sería copiar una contraseña, una cuenta de correo o un teléfono móvil. Si la app tiene acceso a esa información, podría explotarla.
Estos cambios, por cierto, se aplican en Android Q, pero a todas las aplicaciones. En palabras de Google, "afectan a todas las aplicaciones que se ejecutan en Android Q, incluso si se dirigen a Android 9 (nivel de API 28) o inferior". Esto es un punto interesante, ya que evita que un desarrollador pueda seguir accediendo al portapapeles "optimizando" la app para una versión antigua del sistema operativo. Aun así, incluso con esa "trampa", tampoco se llegaría muy lejos, ya que Google fuerza a los desarrolladores a que cada determinado tiempo actualicen sus apps a APIs más recientes si quieren distribuirlas en Google Play.
No son los únicos cambios relacionados con la privacidad. También se ha eliminado el acceso a /prop/net, que sirve para consultar el estado de red de un dispositivo. Asimismo, las aplicaciones deberán tener el permiso "red privileged phone state" para poder consultar el IMEI y el número de serie.
Vía | developer.android
Ver todos los comentarios en https://www.xatakandroid.com
VER 0 Comentario